Es de dominio público que esta temporada el Real Sporting, a pesar del cambio de propiedad, necesita vender si quiere tener un tope salarial más competitivo. Aunque la campaña de abonados -criticada por los precios- va a buen ritmo y en el club ven viable superar esos 20.000 abonados, no es suficiente. Las pérdidas acumuladas de ejercicios anteriores, junto con otras vicisitudes como arrastrar varios contratos muy altos, le obligan a buscar vías de ingresos y los traspasos es la más corriente. Sobre todo porque en su plantilla hay varios jugadores atractivos en el mercado; como el caso de José Gragera.
El mediocentro de 22 años lleva tiempo seguido por varios clubes, uno de ellos el Getafe. El conjunto azulón ya ofertó por él hace un año, con una oferta muy baja que el Sporting no atendió. Ahora, desde el sur de Madrid se vuelve a tantear la situación, aunque en el club rojiblanco no malvenderán al jugador. Con contrato hasta 2024, a Gragera le restan dos años de contrato y en el Sporting siempre han querido renovarle con un contrato mejor y más largo. Aun así, si la oferta llegase a los cinco millones de euros, el club podría acceder a su venta.