Este Real Madrid no sabe perder
Partido gris de los blancos, que consiguieron solventar con goles de Luka Modric, Lucas Vázquez y Federico Valverde. El Sevilla tuvo en la lona a los blancos.
El Real Madrid consiguió sumar los tres puntos en el Santiago Bernabéu ante el Sevilla. Los goles de Luka Modric, Lucas Vázquez y Federico Valverde sanaron un partido gris en el que el Sevilla podría haber hecho daño en la segunda mitad.
El Real Madrid Club de Fútbol lo ha vuelto a hacer. En un partido marcado por la lluvia y la relajación posterior al primer gol, el de Luka Modric, los blancos supieron sobrellevar el tanto del Sevilla Fútbol Club, y viendo, incluso, como peligraba esa victoria. Pero ese gen ganador sigue y sigue.
El partido arrancó con un Real Madrid buscando muy arriba al Sevilla, y provocando imprecisiones en la salida de balón, ayudadas por la fuerte lluvia, que complicaba el control del balón. Eso lo aprovecharon los blancos, que agarraron una pérdida de Gonzalo Montiel para que acabase en gol de Modric a pase de Vinícius Júnior.
Despertó el gol momentáneamente al Sevilla, pero sin resultado. El Real Madrid le echó cloroformo al partido y lo durmió, volviéndolo tan frío como el día. Las imprecisiones pasaban a ser las protagonistas. Las ocasiones, de caer, eran blancas, con David Alaba de falta y un par de contraataques blancos con Luka Modric y Vinícius como protagonistas.
Pero el Real Madrid no tenía prisa, se veía cómodo y, al Sevilla, agazapado. El descanso se plantó en el Estadio Santiago Bernabéu con el 1-0 y poco fútbol que echarse a la boca.
Ritmo igual de pesado que en la primera mitad a la vuelta de los vestuarios. El Real Madrid parecía no querer meter el segundo, y eso lo aprovechó el Sevilla. Una buena presión arriba, un error blanco en la salida de balón y gol de los chicos de Jorge Sampaoli de las botas de Erik Lamela. Se quemaron los chicos de Carlo Ancelotti.
El Real Madrid, en la lona, viendo como Isco y de nuevo Lamela podrían haber revertido el marcador en minutos posteriores al empate. Pero los cambios fueron un lavado de cara para los blancos. Con el partido ganando en intensidad y dureza, la entrada de Marco Asensio cambió todo. Protagonista en los dos goles posteriores.
En el primero, arranca el contraataque en el que Vinícius Júnior se la cede en boca de gol a Lucas Vázquez, que sólo tiene que empujarla. Y en el segundo, se la deja a Federico Valverde para que vuelva a rasgar las redes de una portería con un chicharrazo en el que nada pudo hacer Yassine Bounou. De peligrar los tres puntos a sacarlos con solvencia, ese gen Real Madrid.
Poco más en unos últimos minutos en el que el Sevilla estaba muerto, tras haber recibido el tercer gol, pero haber rozado con la punta de los dedos sacar unos puntos más que necesarios para volver arriba en LaLiga Santander.
