Croacia se vuelve a aliar con la épica

Croacia ya es equipo de semifinales. Hizo falta una tanda de penaltis para dirimirlo en un partido en el que el guión planeado por Croacia le salió casi a la perfección durante 105 minutos. Eso fue lo que Neymar, con su septuagésimo séptimo gol con Brasil, que le permite empatar con Pelé, tardó en batir a un Livakovic estelar en la meta croata y casi dar por hecho el pase de la ‘verdeamarela’ a semis. El guardameta, junto con su defensa, donde solo Sosa desentonó levemente, fueron los grandes artífices junto con el gol de Petkovic a tres del final, de que la eliminatoria llegase a penaltis, donde, como contra Japón en octavos de final, los balcánicos salieron ganadores.

El partido tuvo una primera parte en la que la selección ajedrezada le quitó y escondió el balón. Los de Tité tenían que muchas veces perseguir sombras, adecuándose a un tipo de partido que hasta ahora nadie les había planteado en esta Copa del Mundo. Un guión en el que se les notaba incómodos y la prueba fue ver constantemente a Paquetá, pero sobre todo a Neymar bajar mucho a recibir cuando la ‘Canarinha’ buscaba salir con el balón desde atrás. En el otro lado, Croacia sumaba pases, algunos de alto riesgo en zonas comprometidas, pero sabedores de que eso bajaba las revoluciones al partido y que le venía bien, como demostraría en varias llegadas sin lograr inquietar, eso sí, a Allyson.

La primera ocasión del partido, eso sí, sería brasileña. Vinicius probó suerte con un disparo que no inquietó a Livakovic. Sería, junto con uno de Neymar de falta en el ocaso del primer periodo, su único disparo. Porque Brasil no tenía la pelota para generar más ocasiones. Esa era de Croacia, que tampoco logró inquietar a Allyson, pero sí hacer el partido largo y tedioso para los brasileños. Mientras éstos quieren ritmo y alegría en el juego, Croacia les proponía todo lo contrario: aburrimiento y pesadez.

Además los de Zlatko Dalić sabían que el peligro llegaba por las bandas, donde Militao y Danilo no son laterales y podrían sufrir con espacios a su espalda. Lo interpretaron bien los balcánicos, pero sin acierto en la toma de decisiones para hacer más daño. Aun así, lograron que Danilo viene una amarilla que podía ser muy peligrosa para más adelante si Tité o sus jugadores no eran capaces de cambiar el sino del partido tras el descanso.

Algo que, desde luego, intentaron y casi lograron. Porque en apenas dos minutos generaron más peligro que en los cuarenta y cinco anteriores. Pero apareció entonces Livakovic, héroe croata, para salvar el 0-1 en dos ocasiones a Vinicius. Poco después sería a Neymar al que le negaría el gol de una selección brasileña que ahora sí estaba más metida en el partido. Croacia intentaba bajar las revoluciones de nuevo al partido, con muy poco éxito, ya que ahora los brasileños se les notaba mucho más cómodos. Paquetá, en una acción de bastante fortuna en los rechaces, volvió a encontrarse con Livakovic.

En cualquier caso, a Tité no le gustaba lo que veía. Tenían más control de balón y del partido, pero el partido estaba atascado y las entradas de Antony y Rodrygo buscaban esa fluidez. Pero los cambios no la aportaron. Si hubo más ocasiones de Brasil que, como casi siempre, les negó Livakovic, para que el partido siguiese agonizando y acercándose de forma irremediablemente a una prórroga que Militao pudo impedir con un balón suelto que se fue pegado al poste.

Los balcánicos sumaban un nuevo tiempo extra como contra Japón, pero aguantaban los embistes de una ‘Canarinha’ que, si bien aún se mostró atascada, ahora sí era más reconocible. Brasil siguió buscando el gol, pero seguía igual de atascada ante una Croacia que tuvo la victoria en una acción de Petkovic que Brozovic, con todo a favor, mandó arriba ante Allyson en la que fue la mejor ocasión de los ajedrezados en todo el encuentro.

Pero ahí los de Dalic perdonaron y lo pagarían solo tres minutos después. Porque Neymar, que seguía en el campo a pesar de ser intrascendente, se iba a volver trascendente y diferencial. El jugador del PSG cogió un balón en la frontal, tiró la pared con Paquetá y regateó a quien se le puso delante, Livakovic incluido para marcar a placer y desatar la locura en la parroquia brasileña presente en el Education City Stadium. Un gol que permitía al astro brasileño igualar a Pelé con 77 goles con la ‘Canarinha’.

Pero Croacia no se iba a rendir. Este país de apenas tres décadas de vida tiene un idilio con la Copa del Mundo que querían prolongar. Los de Zlatko Dalic se fueron arriba con todo lo que tenían y Brasil lo fio todo a la defensa. Pero cometieron un error. Un error de permitir a Croacia correr y no perdonaron. Orsic asistió y Petkovic machacó con un remate imposible para Allyson. A falta de tres minutos, los balcánicos volvían al partido y a forzar los penaltis para dirimir quien avanzaba a semifinales.

Una tanda que fue de manual para los croatas. Éstos anotaron sus cuatro lanzamientos, mientras que Brasil vio como Rodrygo no superaba a Livakovic y Marquinhos, en el lanzamiento decisivo, estrellaba su disparo en el palo, dando el pase a los croatas. Éstos ahora esperan ganador del Países Bajos – Argentina de hoy para conocer a su rival.