“La Copa pasa factura”: Dolorosa derrota del Gimnàstic ante el Atlético Baleares
El cansancio dejó espacio a los de Onésimo Sánchez, que aprovecharon los momentos oportunos y encarrilaron el partido gracias a un Dioni enchufado.
Previa: Necesidades e inicios de ciclo
Tras una fatídica prórroga ante el CA Osasuna, el Gimnàstic abandonaba el sueño copero para volver a su realidad. Una realidad prometedora en Primera Federación, que podía seguir consolidándose hoy ante un Atlético Baleares con urgencias.
Los de Raúl Agné demostraron de lo que son capaces ante un Primera, y como aseguró el míster zaragozano, esto iba a significar una motivación extra para afrontar el resto de la temporada.
A pesar de iniciar con bajas importantes, como el reclamado Pablo Fernández, Marc Montalvo o Èric Montes (todos sancionados), los catalanes afrontarían el encuentro con la mirada en el cielo, pues los tres puntos ya les iban a situar en zona de Play-Off a dos puntos del CD Eldense.
El conjunto balear, en cambio, afrontaba una situación bien diferente. Onésimo Sánchez se estrenaba como nuevo entrenador tras los últimos resultados y, como dejó claro en su presentación, encaraban el partido sin excusas y con la vista puesta en salvar la categoría.
Sin duda, el partido que hoy acogía el Nou Estadi Costa Daurada iba a darnos de qué hablar: La afición del Nàstic, después de dejar todos sus ánimos en el último encuentro de Copa, no nos decepcionaría para apoyar a su equipo en un nuevo partido de Liga; Y los de Onésimo se dejarían la piel para defender su temporada, que debía empezar a mejorar hoy.
Primera parte: Ocasiones baleares y frustración local
Nàstic y Atlético dieron inicio al encuentro con las expectativas altas y con la tensión por las nubes. Reinó la agresividad en unos primeros minutos intensos, donde el equipo local sufrió varias desconexiones peligrosas que, por poco, no lo costaron el primer tanto.
Ambos conjuntos se repartieron las ocasiones pasados los 15 primeros minutos, con ocasiones de todos los colores. Miguelete, actuando de falso nueve, tuvo la más clara en el área del Gimnàstic, pero el balón salió rechazado por la defensa.
A pesar de la falta clara de dominio por parte de los dos equipos, los ‘Granas’ consiguieron sacar petróleo de un saque de esquina centrado por Marc Fernández, que acabó rematando Quintanilla y asustó a todo el equipo balear tras tocar el travesaño.
Fue notable el cansancio en la plantilla tarraconense, que no actuó con claridad en algunas ocasiones y dejó espacios muy peligrosos. El Atlético no pareció aprovechar el ‘handicap’ local, aunque sí generó ocasiones desde fuera del área.
El conjunto de Onésimo, cuando parecía estancarse en su propuesta, sorprendió al Nàstic con dos jugadas idénticas que la defensa Quintanilla y Josema no cubrieron. La primera no tuvo éxito debido a un fuera de juego, pero la segunda la aprovechó Dioni, que con la zurda ponía el 0-1.
A falta de 10 minutos, parecía pedir cambios a gritos el equipo de Agné, que no alcanzó prácticamente ninguno de los contraataques mallorquines, afectados por el cansancio. Los locales se vieron frustrados por la presión de los baleares, que no les dejaron avanzar tras la media hora de juego.
El planteamiento de Onésimo Sánchez, posesivo y a la espera de los fallos defensivos rivales, generó muchas dudas entre el equipo de Tarragona, que no supo reaccionar en la primera parte y los dejó a la espera de redimirse en la segunda mitad.
Segunda parte: Un esfuerzo insuficiente
El técnico ‘Grana’, Raúl Agné, realizó dos cambios en el medio tiempo para reactivar al equipo ofensivamente: Aaron Rey, con dudas tras lesionarse, y Andrei Lupu.
Estos mismos, pocos segundos después del silbido del colegiado, generaban la primera ocasión de peligro para el Nàstic. Rey realizó una gran jugada individual para que Lupu diera el golpe. Aunque sin efectividad, se animaron los de Agné tras sumar piernas frescas.
El Gimnàstic consiguió verticalidad y comenzó a avanzar con el esférico, pero el Atlético Baleares supo aguantar y la presión rival pasó factura a los ‘Granas’.
Volvió a estancarse el equipo de Agné, que salvo por algunas internadas de Joan Oriol y Pol Domingo, no conseguía deshacerse de los blanquiazules.
Y desde las bandas, llegó el gol. Joan Oriol colaba un balón entre la defensa y, tras un rechace, remataba Marc Fernández para empatar el partido.
Se animó la grada local, pero duró poco la alegría. Dioni, igual que en su primer gol, recibía un balón filtrado desde la banda para rematar a placer ante Manu García y hacer el 1-2.
El Atlético soportó los siguientes ataques del Nàstic, que no acabó de estar acertado, ni encontró el hueco. Los de Onésimo demostraron un nuevo carácter ante el Gimnàstic, y tras las malas rachas en la competición regular, parecía que por fin habían dado con la fórmula para remontar su situación.
Mantenía la posesión el Nàstic ante el planteamiento defensivo del rival, pero aun así, los de las islas conseguían crear peligro en ciertos momentos. Así los demostró Miguelete, que rozó el palo ante Manu y asustó a los locales. Se reactivó el conjunto de Agné, que necesitaba la victoria como agua de mayo, y la motivación dio energías extra.
Marc Fernández tiró al travesaño en una falta cercan al área, dando esperanzas y creando aún más tensión en el ambiente. Pero acto seguido, tras un maravilloso engaño de Aaron Rey, Guillermo Fernández remataba solo y fallaba, tirando al pecho del portero.
El mismo Guillermo presionó con efectividad unos minutos después y, de nuevo, se quedó solo ante Lucas Díaz, pero volvió a desaprovechar una ocasión clara al tirarse el balón demasiado largo en el área tratando de rematar.
Tras esta clara jugada del ex-delantero del Burgos, se enfrió el estadio, que veía como el Gimnàstic comenzó a regalar balones muy seguidamente cerca del área ante la presión del resultado. Cumplidos los 90 minutos, lo siguió intentando el Nàstic, pero nada parecía hacer cambiar el marcado.
Solo cambió a favor del Atlético Baleares, que tras un balón dividido cerca del área de Manu García, ponía el 1-3 con una gran jugada de Dioni, que conseguía su hat-trick en el día de hoy. Así terminó el encuentro. El Gimnàstic, con esfuerzo acumulado, no terminó de funcionar el día de hoy ante un Atlético Baleares muy bien planteado por Onésimo Sánchez. El equipo balear dominó y definió en los momentos adecuados, dejando decepcionado a un Nàstic que aspiraba a más.
Conclusiones: Nuevas oportunidades
Los de Raúl Agné funcionaron por fases en el encuentro, que salió de cara para los rivales. A pesar de los esfuerzos, el cansancio del partido copero ante Osasuna dio ventaja a los de las islas en muchas facetas, sobre todo en cuanto a las contras, donde aprovecharon las pocas oportunidades que tuvieron.
Ahora, ambos equipos ya se centran en remontar sus situaciones. El Atlético quiere demostrar que el inicio de ciclo es real, y que Onésimo puede dar muchas alegrías lo que resta de liga. Y el Gimnàstic, con lo que queda de temporada, ha de afrontar aún campos difíciles y no dejar atrás el esfuerzo que llevaban hasta ahora.
El próximo encuentro del Nàstic se disputará ante el Cornellà, un partido difícil, pero que debe servir como lección y usarlo con picardía para reforzarse.
