Bellingham desata la locura en el Bernabéu y sentencia la Liga

El gol de Bellingham en el descuento deja al conjunto blanco a 11 puntos del Barça, dejando la Liga totalmente sentenciada

0
Real Madrid 3 2 Barcelona

Volvía El Clásico del fútbol español a La Liga EA Sports en un partido que, a todas luces, parecía ser clave en la carrera por el título. Un encuentro en el que el Santiago Bernabéu se vestía de gala en busca de que el Real Madrid diese el golpe decisivo sobre la competición liguera, teniendo la posibilidad de ponerse a 11 puntos del conjunto blaugrana si se llevaba la victoria. Por su parte, el Barça, busca la posibilidad de reducir la distancia con el conjunto blanco, en busca de obrar el milagro en las seis jornadas restantes.

Un encuentro que enfrentaba a dos equipos con estados de ánimo diametralmente opuestos. Los de Carlo Ancelotti venían de meterse a la heroica en las semifinales de la Champions League, tras el partidazo en el el Etihad en el que dejaron fuera al vigente campeón, después de 120 minutos de puro fútbol. Los pupilos de Xavi Hernández, por su parte, venían de sufrir una dura eliminación en la competición europea frente al PSG, después de que los franceses remontasen la eliminatoria en Montjuic.

Pero ni siquiera el desgaste europeo provocó que ninguno de los dos técnicos se guardasen ninguna bala en la recámara. Ancelotti salía con todos los héroes de Manchester excepto Carvajal, Nacho y Mendy, siendo sorprendente la presencia conjunta de Kroos y Modric, que apuntaban a tener su último baile juntos en una gran cita. Por su parte, en lo relativo al conjunto culé, tan solo Pedri quedó fuera del once, siendo el único cambio en el conjunto azulgrana respecto a la eliminatoria europea. Y con este pretexto, solo el pitido inicial nos separaba de una encarnizada batalla.

Dos errores marcan el desarrollo de la primera mitad

Los primeros compases del encuentro estuvieron marcados por las imprecisiones por parte de ambos conjuntos, que tardaron varios minutos en empezar a desplegar su fútbol sobre el verde. Sin embargo, la lata tardó poco en abrirse. Concretamente, en la primera jugada del encuentro, y a balón parado. En el primer córner a favor del Barça, un balón pasado voló hacia el segundo palo. Lunin no acertó a palmear un balón que, sin embargo, sí acertó a rematar a placer Christensen, poniendo por delante al conjunto azulgrana.

Ya por delante en el marcador, ahora era el Madrid el que tomaba la iniciativa en busca de dar la vuelta al mal comienzo del encuentro. Los de Xavi, en cambio, optaron por darle el cuero al conjunto blanco, que cada vez tomaba más protagonismo en las inmediaciones del área azulgrana. Y la primera clara del partido para el conjunto blanco también tuvo un toque a balón parado, tras una falta botada por Kroos en la misma frontal del área, que el brasileño cabeceó fuera.

El Barça, sin embargo, también quiso mostrar sus dotes ofensivas. Especialmente a través del perfil derecho del ataque, en el que Lamine Yamal era una amenaza constante para la zaga blanca, llegando a hacer intervenir a Lunin tras una peligrosa incursión en el área. No obstante, el domino del conjunto blanco era cada vez más asfixiante y más cercano al área. Y tras una jugada aislada por la derecha, fue ni más ni menos que Lucas Vázquez, sustituto de Carvajal en el once, el encargado de hacer el lio y provocar un claro penalti de Cubarsí que el colegiado no dudó en señalar.

Un balón que desde el primer momento agarró Vinicius, decido a poner las tablas en el marcador. Y así lo hizo con un golpeo raso al palo izquierdo de Ter Stegen, con el que puso las tablas del marcados antes de cumplirse los veinte minutos de encuentro. Un empate con el que el Madrid olió la sangre, y no dudó en volcarse en busca del segundo tanto, ante un Barça que se defendía como podía de manera posicional de las acometidas blancas.

Y en ataque, los de Xavi Hernández seguían encontrando en el balón parado un filón por el que atacar al conjunto blanco. De hecho, en el segundo córner a favor del conjunto culé estuvo cerca de volver a ponerse por delante en el marcador, con un cabezazo que se marchó por poco por encima del larguero. Y volviendo a repetir la ocasión, el tercer córner también estuvo a punto de poner por delante al Barça, con un golpeo directo de Gündogan que Lunin acertó a despejar sobre la misma línea, a pesar de que los jugadores culés reclamaron que el esférico había sobrepasado la raya de meta.

Poco a poco, el conjunto azulgrana se iba despejando del dominio blanco, y fue teniendo cada vez más presencia en el campo contrario. El ritmo del encuentro también disminuyó, dando paso a unos minutos de calma en los que ninguno de los dos equipos se volcaban al ataque. Solo algunas jugadas aisladas eran capaces de romper la tónica de un encuentro que había perdido la verticalidad, pero ninguno de los dos equipos lograba crear una amenaza y seria sobre el área rival.

Probó suerte Modric desde la frontal del área tras una bonita jugada coral del conjunto blanco en la zona de tres cuartos del Barça, pero el golpeo salió demasiado centrado, yendo directamente a los guantes de Ter Stegen. Por parte del conjunto azulgrana, Gündogan hizo lo propio con una falta desde la frontal, con un golpeo que se marchó muy cerca de la escuadra defendida por Lunin.

Otro grave error en la salida del esférico estuvo a punto de provocar que el Madrid se adelantase al borde del descanso, pero el taconazo con el que Vinicius intentó habilitar a Rodrygo se quedó corto, y Araujo tuvo el tiempo suficiente para evitar que el brasileño rematase a placer frente a Ter Stegen.

El final de la primera mitad, sin embargo, estuvo marcado por la lesión de Frenkie De Jong, que tuvo que abandonar el terreno de juego en camilla después de un lance del juego en el que chocó con el balón durante una disputa con Fede Valverde, que impactó de forma dura con el esférico, dejando mal parado al holandés. Otra mala noticia para Xavi, que tuvo que dar entrada a Pedri en su lugar.

Bellingham reina en una segunda mitad de locura

La segunda parte arrancó con un guion similar al que finalizó la primera, con el Madrid llevando la iniciativa en la medular, y un Barça que amenazaba siempre que robaba el cuero en campo contrario. Y la primera de la segunda mitad cayó del lado blanco, en esta ocasión, tras una acción individual de Bellingham, que el inglés finalizó con un zurdazo desde fuera del área, que atrapó Ter Stegen sin demasiadas complicaciones.

No obstante, y del mismo modo que ocurrió en la primera mitad, los errores individuales estaban siendo determinantes para el conjunto blanco, especialmente en las cercanías del área azulgrana, evitando así ocasiones claras de gol. Trató de buscar Bellingham las cosquillas a la espalda de la zaga culé, con un balón largo que alcanzó un rapidísimo Vinicius, pero que, sin embargo, llegó forzado a la zona de remate, por lo que su golpeo con la pierna derecha se marchó muy desviado.

Ante el dominio blanco, el Barça trataba de minimizarlo con posesiones largas, tratando de arrebatar el esférico a los de Ancelotti. Sin embargo, el encuentro no terminaba de recuperar esa verticalidad que había marcado la primera media hora de encuentro. Y por si la primera mitad no tuvo suficiente polémica, el Santiago Bernabéu reclamó mano de Koundé, y en la jugada posterior estuvo a punto de poner por delante al Barça un Ferrán Torres que acababa de salir al terreno de juego. Sin embargo, finalmente Soto Grado, previa revisión del VAR, determinó que no hubo nada punible en la acción de Koundé.

En la jugada inmediatamente posterior a la polémica, un golpeo de Lamine que pasó por debajo de Ferrán se envenenó de tal forma que Lunin no  pudo acertar a despejar. El rechace cayó en los pies de un recién salido al campo Fermín, que solo tuvo que empujarla al fondo de las mallas, poniendo nuevamente por delante al Barça. El escenario era similar al de la primera mitad, y al Madrid le tocaba remar de nuevo si no quería que el conjunto azulgrana se llevase los tres puntos del Bernabéu.

El Madrid volvía a remar a contracorriente. Pero es de sobra conocido por todos que es muy difícil tumbar al conjunto blanco, y más aun en su estadio. No habían pasado ni tres minutos desde que el Barça se adelantase, cuando Vinicius encaró a la zaga azulgrana desde el perfil izquierdo. El brasileño tiró de recursos para sacar un centro con el exterior que encontró a Lucas Vázquez totalmente solo en el segundo palo, que remató plácidamente, dejando a Ter Stegen con muy pocas opciones de salvar el esférico, y volviendo a poner las tablas en el marcador.

El partido volvía al punto de partida sobre el papel, pero la realidad es que, a falta de cuarto de hora, el encuentro había comenzado a romperse. A la salida de un córner, un despeje largo de la zaga blanca merengue pilló desprevenida a la defensa culé a la espalda, con un Vinicius que logró marcharse en velocidad y plantarse frente a Ter Stegen. Trató de cruzarla, ya algo escorado, encontrándose con una gran intervención del meta alemán, que evitó que el Madrid se adelantase.

Con el partido ya roto, la sensación sobre el verde era que cualquiera de los dos equipos podía llevarse los tres puntos. Pero la más clara se la apuntó el conjunto blanco en una jugada a balón parado en la que hubo hasta tres remates a puerta en el área pequeña, pero ninguno se coló en las mallas defendidas por Ter Stegen, a pesar de que el ultimo de esos remates había quedado invalidado por fuera de juego. Y es que llegados los últimos instantes de juego, era el conjunto blanco el que ponía más empeño en llevarse la victoria.

Y como es habitual en el futbol, el que la siguen habitualmente la consigue. Y con un Madrid mucho más volcado al ataque, fue Brahim el que se vistió de motor para dar a su equipo una ocasión de oro. Logró encontrar en la banda a Lucas Vázquez desmarcado en la banda. El lateral puso un balón que Joselu no acertó a rematar en primera instancia. Pero, en el segundo palo, Bellingham llegó como un tráiler para colocar el balón en la escuadre, con un remate ante el que poco pudo hacer Ter Stegen.

Un gol que hizo el Bernabéu caerse abajo, sabedor de la importancia de los tres puntos que significaban la sentencia de la Liga. Una sentencia que vino de las manos de Bellingham, uno de los actores principales del conjunto blanco durante toda la temporada, y que dejaba al Madrid con el medio título en las vitrinas del Santiago Bernabéu, cerrando así una semana histórica, y dejando a los de Xavi son opción de llevarse ningún título en la misma semana.

Ficha técnica
Real Madrid C.F.: Lunin; Lucas, Tchouaméni, Rüdiger, Camavinga (Fran García, 71′); Modric, Kroos (Brahim, 71′), Valverde, Bellingham, Vinicius (Joselu, 82′) y Rodrygo (Militao, 74′).
F. C. Barcelona: Ter Stegen; Koundé, Araújo, Cubarsí, Cancelo; Christensen (Fermín, 45′), Gündogan, De Jong (Pedri, 45′); Raphinha (Joao Feliz, 63′), Lamine Yamal y Lewandowski (Ferrán Torres, 63′).
Goles: Christensen (5′), Vinicius (18′), Fermín (69′), Lucas Vázquez (72′), Bellingham (93′).
Árbitro: César Soto Grado, del Comité de Arbitraje de La Rioja. En el VAR, José María Sánchez Martínez, del Comité de Arbitraje de Murcia.
Incidencias: Partido correspondiente trigésimo segunda jornada de La Liga EA Sports, disputado en el Santiago Bernabéu. (21:00h).
Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

This website uses cookies to improve your experience. We'll assume you're ok with this, but you can opt-out if you wish. Accept Read More

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies