En el Real Madrid las cosas no han funcionado esta temporada. El conjunto de Carlo Ancelotti ha ofrecido una imagen pobre en la mayor parte de sus encuentros. Sin ir más lejos el pasado domingo ante el Sevilla no fueron capaces de arrasar ni mostrase superiores a un Sevilla que jugaba con 9 tras dos expulsiones. Si bien es cierto que el conjunto blanco ya no se jugaba nada.
Y no jugarse nada ha sido, precisamente, consecuencia de una mala temporada que le llevó en este 2025 a perder a principios de año el título de la Supercopa de España ante el Barça. Un Barça que le adelantó por la izquierda en Liga dejando el título visto para sentencia tras imponerse en el cuarto clásico de la temporada. Todos los duelos ante el eterno rival de este curso, incluida la final de Copa del Rey, cayeron del lado azulgrana que ha sido claramente superior.
Toca hacer borrón y cuenta nueva y pensar ya en clave de futuro. Un futuro en el que no estará el máximo señalado por la debacle de esta temporada, Carlo Ancelotti. El entrenador italiano emprenderá una nuevo camino como seleccionador de Brasil pasando el testigo en el Santiago Bernabéu a un Xabi Alonso que ilusiona mucho y que no quiere heredar los problemas que ha sufrido el italiano esta temporada.
La defensa, un quebradero de cabeza
El principal problema para Carlo Ancelotti a lo largo de toda la temporada ha estado en defensa. Ahí, el técnico italiano ha tenido que lidiar con lesiones contantes y mal rendimiento condenando a un equipo que tampoco ha estado fino en ataque.
Los problemas comenzaron desde principio de curso con las bajas de larga duración de Dani Carvajal y Eder Militao. Dos titulares indiscutibles que dejaban un hueco difícil de cubrir. En el lateral, Ancelotti optó por el recambio natural que era Lucas Vázquez que perdió protagonismo con la reconversión de Fede Valverde que jugaba mejor dadas las carencias mostradas por el gallego.
Para el eje de la zaga, le costó a Ancelotti apostar por la cantera y, con Alaba fuera de combate también, apostó porque Tchouaméni formase pareja con Rüdiger. Un experimento que no salió bien. La llegada de Asencio lo cambió todo, pero las molestias y bajas de Rüdiger y Alaba han complicado la misión. Ambos están lesionados en la actualidad lo que ha hecho que el Real Madrid tomase medidas urgentes.
Huijsen, el fichaje estrella
La necesidad acuciante de reforzar la zaga ha llevado al Real Madrid a lanzarse a por un fichaje que, si bien llevaba meses sondeando, ha cerrado hace apenas unos días. Hablamos de Dean Huijsen que será oficialmente jugador blanco desde el 1 de junio y ha firmado 5 temporadas. El central es muy del gusto del conjunto blanco que al principio dejó su incorporación en stan by debido a su elevado precio. Sin embargo, finalmente se han lanzado y pagarán los casi sesenta millones por un jugador que, a pesar de su juventud, es un seguro en defensa y tiene proyección en ataque donde, gracias a su 1,95 metros de altura, es un arma secreta en las jugadas a balón parado.
El Leipzig dispuesto a negociar por Lukeba
Su llegada ilusiona a un Real Madrid que no descarta firmar algún jugador más para el centro de la zaga. La posible salida de Alaba y el esquema más utilizado por Xabi Alonso que incluye tres centrales así lo apuntan. Uno de los nombres que al igual que Huijsen ha estado meses en el radar blanco ha sido Castello Lukeba que ahora se habría puesto a tiro.
Y es que según el periodista especializado en mercado Ekrem Konur, Castello Lukeba tiene una cláusula de rescisión de 90 millones de euros en su contrato, pero el RB Leipzig está dispuesto a negociar por 70 millones, una cifra que sigue siendo elevada, pero mucho más asequible que la anterior.