Aston Martin y Adrian Newey han renovado las ilusiones de Fernando Alonso. Lo han hecho con el salto adelante de este AMR25 y con todo lo que puede llegar en la próxima temporada 2026. Y aunque como ya reveló el mismo piloto que la incidencia del ingeniero en este curso va a ser cuanto menos mínima, la sola presencia del técnica hace que Alonso no esconda sus esperanzas de cara al futuro.
Alonso y Newey trabajan juntos en Aston Martin después de ser enemigos en pista durante más de 20 años
Eso se ha traducido en que el doble campeón del mundo se vea más fuerte que nunca y, como ya viene demostrando a lo largo de toda esta temporada, cuando el coche esté en una posición importante es capaz de pescar resultados sorprendentes. Por ejemplo, el que haya podido colocar su Aston Martin entre los diez primeros en las últimas cuatro carreras consecutivas, algo que no pasaba desde inicios del 2024, hace más de año y medio.
Y con Newey eso se hace más palpable, más evidente. Los dos son los mejores en lo suyo; uno a través del volante, sacando y aprovechando el máximo partido de cualquier coche, y el otro hace las delicias de los amantes del automovilismo y las carreras trazando algunos de los mejores coches de la historia de la Fórmula 1.
Así, Newey y Alonso se han unido para trabajar juntos en Aston Martin desde este 2025 después de haber sido durante mucho tiempo enemigos en pista, muy feroces durante más de 20 años, pero respetuosos fuera de ella. Así ha sido desde siempre la relación entre Adrian Newey y Fernando Alonso, que incluso escribió en el prólogo del libro del diseñador, Como hacer un coche.
La admiración mutua ha estado vigente a partir del primer día que coincidieron, allá por el 2005, cuando Alonso pilotaba aquel Renault con el que salió campeón del mundo por primera vez y Adrian era el creador del coche de su rival, Raikkonen. Un velocísmo McLaren que sufrió durante buena parte de la temporada los constantes problemas de fiabilidad.
Newey: «La capacidad de Alonso de pilotar sobrepasa al coche que lleva. Es la señal que lo hace grande de verdad»
Tiempo más tarde, el mismo Newey aseguró que estuvo a punto de poder trabajar con Fernando en la primera era ganadora Red Bull, en 2008, pero no cuajó «aunque la rivalidad con Vettel en el equipo hubiera sido como la de Ayrton Senna y Alain Prost», llegó a decir en una entrevista en Squire en 2019.
En esa misma entrevista, el gurú se deshizo en halagos sobre el español, quien ya no estaba en la F1 después de haberse retirado ese y el siguiente año tras su paso por McLaren. «Uno de los más grandes es Fernando Alonso», empezó diciendo.
«Red Bull generalmente siempre ha intentado seguir la política de desarrollar a sus pilotos desde jóvenes, en vez de comprar talento ya existente. Ésa era una pequeña consideración. Nos vimos un par de veces. Las negociaciones [para que Alonso fuera a Red Bull] se hicieron en Austria. Estuvo cerca, pero no pasó«, dijo.
Alonso ya comentó en el libro de Adrian que se vieron un par de veces en Spa en ese 2007, pero finalmente no se llegó a un acuerdo. «Estuvo muy cerca. Es una verdadera lástima que no se consiguiera. Creo que hubiéramos tenido muchos éxitos juntos», afirmaba Fernando por entonces, cuando el inglés seguía siendo parte del equipo Red Bull… y Aston Martin apenas se llamaba Racing Point.
Fue ahí cuando el técnico habló de la capacidad de pilotaje de Fernando Alonso y la manera de afrontar las carreras; el por qué, como el técnico, el asturiano es considerado como uno de los mejores pilotos que han pasado por la historia de la Fórmula 1.
«La capacidad de Fernando para pilotar sobrepasa a menudo al coche que tiene entre manos. Creo que esa es la señal de un piloto que es grande de verdad: la habilidad para destacar a pesar de que no conduzcas un coche muy bueno», recalcaba el británico.
«Es una pena que solo haya ganado dos mundiales»
Siguiendo con el bicampeón español, a Adrian le parece que dos títulos son pocos para los que merece Alonso: «Es una pena que solo haya ganado dos mundiales. ¿Quién esperaba que de 2007 a hoy no volviese a ganar? Pero todavía está en buen camino y todavía está en la cima».
«La capacidad de Fernando para pilotar sobrepasa a menudo al coche que tiene entre manos. Creo que esa es la señal de un piloto que es grande de verdad: la habilidad para destacar a pesar de que no conduzcas un coche muy bueno».
Cuatro títulos seguidos, uno detrás de otro, que le auparon a lo más granado de la historia de la Fórmula 1. Tenía la mejor herramienta entre sus manos y no la desaprovechó. El que lo hizo fue Vettel, pero bien pudo ser Alonso. El asturiano rechazó a Red Bull para cumplir el sueño de correr en Ferrari y no le salió como esperaba.
De haber recalado en la factoría energética su historial habría sido muy diferente y todos allí le habrían recibido con los brazos abiertos, incluido su mayor genio, Adrian Newey. Ahora, ambos trabajan en un deseo y un objetivo común: ser campeones del mundo, pero con Aston Martin. Uno pone las manos y el talento sobre el volante; el otro, el ingenio para construir un coche ganador. A veces las las cosas salen bien…