Aston Martin vive un movimiento mayúsculo. Adrian Newey está a punto de asumir un poder aún mayor en la estructura técnica del equipo, mientras se espera una posible llegada Christian Horner. El ex de Red Bull aparece como fichaje y figura clave para acompañarle de nuevo.
Newey y Horner, el posible nuevo eje de poder en Aston Martin
Para ello, Andy Cowell no seguirá en su puesto de jefe en Aston Martin y, según reportes como la BBC o ESPN, al frente de la lista de candidatos para relevarle al frente del equipo verde está nada menos que Christian Horner, que se reencontraría con Adrian Newey y con un piloto al que ya quiso fichar en varias ocasiones: Fernando Alonso.
Según las últimas informaciones, el acuerdo entre ambos no parece tener obstáculos. Por lo que Newey y Horner podrían trabajar juntos otra vez, esta vez en Silverstone, con roles muy influyentes para el seno de la escudería de Fernando Alonso.
Lo que se conoce en este momento, sobre todo a medida que las informaciones van creciendo, es que buena parte apunta a que Horner llegaría a Aston Martin como jefe de equipo en el lugar de Andy Cowell, que pasaría a tener otro rol en Aston Martin. Se espera, incluso, que el cambio de puesto del actual jefe sea ya para el próximo Gran Premio en Qatar.
De hecho, Cowell se centraría en su especialidad: el área de motores. En Mercedes fue una pieza clave como jefe del departamento, responsable del propulsor que dominó el inicio de la era híbrida. Bajo su dirección, la marca alemana arrancó con una unidad de potencia muy superior a la competencia, base de los siete títulos consecutivos que lograría el equipo con Hamilton al frente.
Para el caso de Christian Horner, Lawrence Stroll piensa que el ex jefe podría ser la pieza necesaria para dirigir al equipo de Alonso de la misma forma que lo hizo en Red Bull. Además de su labor como Team Principal, también lo haría como copropietario de Aston Martin (como lo es ya Newey) utilizando el capital que Red Bull le pagó por su despido (aproximadamente 80 millones de euros).
Newey se adueña del proyecto técnico de Aston Martin
Ahora bien. Este cambio no solo haría a Horner liderar el equipo como ya hiciera en su momento con Red Bull -desde 2005 hasta mediados de 2025-. Sino que Newey se haría con el control total de todo el proyecto técnico de Fórmula 1 de Aston Martin, solo por detrás del dueño, que es Lawrence Stroll.
La llegada del aerodinamicista más prestigioso de la historia a Aston Martin ya había supuesto un salto de ambición para el equipo, con su nombramiento como socio técnico desde este año. Su influencia ha sido vista como decisiva de cara al desarrollo del coche para 2026, cuando entrará en vigor un nuevo reglamento.
Pero con este posible nuevo paso, Newey podría consolidar aún más su posición. No solo se encargaría de diseñar los monoplazas, sino liderar la estrategia técnica de Aston Martin. Actualmente, el británico ocupa el puesto de Socio Técnico y copropietario.
Al mismo tiempo, Según The Race, el terremoto que ha sacudido a Aston Martin tiene un epicentro claro. Varias fuentes apuntan a que el diseñador quiso reordenar la forma de trabajar del equipo y ahí chocó de frente con Andy Cowell. Lo que empezaron siendo diferencias de enfoque terminó convirtiéndose en un pulso interno que ninguno estaba dispuesto a ceder.
Cowell decide marcharse al departamento de motores
La BBC, a través del prestigioso Andrew Benson, lo explica sin rodeos. La ruptura llegó por un choque de mando. Cowell, como director ejecutivo, debía dirigir la escudería. Newey, además de diseñador jefe, es actualmente accionista del proyecto y una leyenda viviente de la Fórmula 1. En la práctica, su peso dentro del equipo es superior. Y ahí nació el conflicto: dos jefes, un solo volante. Al final, la estructura se inclinó hacia la figura de Newey y Cowell quedó fuera del trazado.
Desde el lado de Newey, su presencia en Silverstone no ha sido cosmética. Como se sabe, y como pudo conocer GRADA3, Adrian trabaja con una intensidad extrema: pasa horas en la fábrica y se lleva documentos a casa para seguir diseñando hasta entrada la noche.
Este perfeccionismo le ha valido el reconocimiento dentro del equipo, pero también lo define como alguien «totalmente inflexible», como lo calificó el mismo Christian Horner. Y es que Adrian Newey no se conforma con compromisos técnicos a medias y exige una estructura que esté a su altura.
Aston Martin sigue su hoja de ruta
Porque hace justo un año, Cowell optó por prescindir de Dan Fallows como director técnico del equipo, un movimiento que reordenó de inmediato la estructura en Aston Martin. Desde aquel momento, Bob Bell asumió el mando del desarrollo del Aston Martin AMR25 de forma provisional, a la espera de la llegada del nuevo director técnico, Enrico Cardile, que se incorporó el pasado mes de agosto.
Han pasado ya muchos meses desde que Adrian Newey se visitera de verde y se mostrara como figura clave del proyecto de Silverstone. Pero su influencia no deja de crecer. Y aunque el foco lleva puesto en 2026 desde prácticamente inicios de año, el equipo no desperdicia la oportunidad de aprovechar los conocimientos del creador del coche más dominante de la historia reciente: el Red Bull RB19, el monoplaza que solo dejó escapar una victoria en 2023. También con Honda, el nuevo motorista del equipo de Alonso el próximo año.
La etapa anterior de los japoneses con McLaren había dejado un sabor amargo, plagado de problemas de fiabilidad y rendimiento. Sin embargo, la colaboración con Newey transformó esa percepción. La integración técnica entre chasis y motor alcanzó un nivel de sinergia pocas veces visto.
¿Y ESA SONRISA? ¿SABES COSAS, ADRIAN?
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— DAZN España (@DAZN_ES) May 22, 2025
Red Bull no solo volvió a competir por victorias, sino que a partir de 2021 dominó con contundencia: cuatro títulos mundiales de pilotos consecutivos con Max Verstappen y dos de constructores entre 2022 y 2023. Detrás de esos éxitos, la fórmula era clara: un motor cada vez más compacto, desarrollado al gusto de Newey, y un diseño aerodinámico afilado que explotaba cada milímetro del reglamento. Todo eso es lo que buscan ahora en Aston Martin, de ahí que Lawrence Stroll otorgue plenos poderes al técnico estrella de la Fórmula 1.
Newey impone su visión
El ingeniero vuelve a dejar claro que su forma de trabajar pasa por tomar decisiones agresivas cuando ve margen para ganar rendimiento. Lo ha hecho a lo largo de su carrera y lo mantiene ahora en Aston Martin. En su biografía ‘How to build a Car’ [Cómo fabricar un coche] recuerda uno de los episodios más representativos. En 2011, con el Red Bull RB7, colocó la batería del KERS entre el motor y la caja de cambios, una solución arriesgada que permitió avanzar el bloque y liberar el paquete aerodinámico. Funcionó entonces y ese tipo de apuestas explican por qué su influencia sigue siendo determinante.
Aston Martin asume esa mentalidad sin reservas. Honda ya lo expresa abiertamente. Su presidente, Toshihiro Mibe, admite que «el peso del nombre de Newey es valioso» y que el equipo está construyendo «un coche espléndido» bajo su supervisión. La marca japonesa considera que su llegada coloca el proyecto en otra dimensión, sobre todo en un momento en el que la F1 encara su nuevo reglamento técnico.
Con todo, la presencia de Newey empieza a notarse en todas las áreas de trabajo de la escudería de Silverstone. Desde el túnel de viento hasta la estructura interna, el británico marca el ritmo y define prioridades. El mismo Alonso o Lance Stroll perciben ya ese cambio en la forma de desarrollar el coche, un giro que sitúa al equipo en una posición inédita y que confirma que la base del futuro proyecto pasa por seguir la línea que ha convertido a Newey en uno de los nombres más influyentes de la historia de la Fórmula 1.
