El Sevilla certificó su clasificación para los dieciseisavos de final tras golear al F91 Dudelange en Luxemburgo. En una fastuosa primera parte en el Josy Barthel, un Sevilla muy renovado en su once, fue una auténtica apisonadora. Guiados por unos extraordinarios Óliver Torres y Rony Lopes, el cuadro sevillista dejó encarrilado el choque en apenas un cuarto de hora. Todo ello a pesar del pésimo estado del césped del Josy Barthel que parecía más un campo de Tercera División que un estadio de competición europea.
Y eso que el encuentro comenzó frío, como el ambiente en el Jozy Barthel. Al Sevilla le costó unos minutos entrar al partido. Dominaba, pero no lograba combinar con acierto y finalizar jugadas en y el Dudelange tuvo la primera clara ocasión del partido. Tras una galopada de Bernier, cedió el balón a Stolz que vio como Gudelj, hoy central, se interponía entre su disparo y la red. Pero a partir de ahí nada más se sabría del Dudelange.
El Sevilla monopolizó de forma absoluta el balón y no bajó el pistón de forma que los goles fueron cayendo uno tras otro. Solo la falta de acierto en la finalización evitó que cayesen más antes del descanso. Dabbur logró el primero tras anotar a portería vacía tras una combinación entre Munir, Óliver Torres y Rony Lopes, que le regaló al israelí el primer tanto con la camiseta del Sevilla. El 2-0 llegaría nueve minutos después una acción calcada, pero en la que sería Dabbur el que asistiría a Munir.
Dos goles más antes del descanso
Nolito y Joan Jordán tuvieron el tercero, pero no acertaron ante Joubert. Lo haría Munir con un lanzamiento de falta directa al palo del portero en el que Joubert ni hizo intento de detenerlo. Y tres minutos después Dabbur lograría el 0-4 al aprovecharse de un balón suelto que Nolito, debido al maltrecho césped, no fue capaz de controlar. Pero el israelí ejerció de cazagoles para lograr su doblete. De ahí al descanso Nolito, Rony Lopes y de nuevo Dabbur tuvieron claras opciones para aumentar más la renta, pero sin puntería.
Tras el descanso el Sevilla cambió su cara. Bajó tanto su intensidad que el Dudelange se creyó que podía hacer daño. Así, Schnell, al 54′ y Bernier al 57′, tuvieron dos buenas ocasiones para batir a Bounou, pero adolecieron de precisión en el remate. Algo que enfadó a Lopetegui que salió enérgico a activara su equipo. Así, dos minutos después De Jong tuvo el quinto, pero se encontró con una buena parada de Joubert en el mano a mano.
Munir y Dabbur se reivindican
El partido estaba jugándose a claramente varias marchas menos que en el primer tiempo. De Jong volvió a tener el quinto en un cabezazo tras saque de esquina. Pero sería Munir, al 66′ el que lo lograría. El hispano-marroquí recibió un excelso pase de Dabbur y en el mano a mano resolvió picando el balón sobre Joubert. Munir lograba así su hat-trick y el delantero israelí, con dos goles y dos asistencias, pedían más minutos. Ese gol parecía cortaría el intento de reacción luxemburgués, pero no fue así.
El Dudelange haría sus tantos del honor al 69′ al rematar Sinani un buen centro de Bouchouari y once minutos después el mismo protagonista lograría el 2-5 con un disparo raso ajustado al poste. El partido llevaba terminado desde el descanso, pero el cuadro luxemburgués lograba, gracias a que el Sevilla ya pensaba en siguientes metas, acabar el partido con un buen sabor de boca.
El próximo encuentro del grupo para el Sevilla, ya clasificado para dieciseisavos, será el jueves 28 de noviembre a las 21:00 horas. En esa fecha recibirá la visita del Qarabag FK azerí. Pero ahora lo que toca de forma más inmediata es la liga y el derbi sevillano del próximo domingo a las 21:00 horas frente al Real Betis Balompié en el Benito Villamarín.