Carlos Sainz Sénior, leyenda del rally y bicampeón del mundo, se está penando presentar su candidatura para la presidencia de la Federación Internacional del Automóvil (FIA). Su candidatura llegaría en un momento crítico, marcado por tensiones internas, escándalos y una creciente demanda de transparencia en la cúpula directiva del organismo que regula las principales competiciones del motor a nivel global.
Según publica el medio Motorsport, Carlos Sainz ha sido sondeado por influyentes figuras del deporte motor, quienes le ven como un líder capaz de restaurar el equilibrio y credibilidad perdidos durante el mandato de Mohammed Ben Sulayem. Aunque aún no ha confirmado su participación todo indica que su nombre será uno de los protagonistas de cara a las elecciones que se celebrarán a finales de año.
Carlos Sainz y su posición en la FIA
Con 63 años y una trayectoria impecable en el automovilismo —incluyendo triunfos en el Mundial de Rally y el Rally Dakar—, Carlos Sainz no solo cuenta con el respaldo de su palmarés, sino también con una reputación intachable. Su perfil ha despertado el interés de miembros influyentes dentro de la FIA que, ante la inestabilidad institucional, ven en él una solución fiable y con capacidad de diálogo.
Fuentes cercanas al expiloto señalan que, si decide presentar su candidatura, lo hará con un programa “constructivo y basado en el consenso”, que devuelva legitimidad al proceso de gobernanza de la FIA. En un escenario donde las divisiones internas amenazan el futuro del automovilismo, Sainz podría ofrecer una alternativa sensata y con visión a largo plazo.
Crisis en la FIA
El actual presidente, Mohammed Ben Sulayem, ha sido el protagonista de múltiples controversias desde su llegada al cargo en 2021. Su posición ha estado salpicada de denuncias sobre autoritarismo, decisiones unilaterales y falta de transparencia. La reciente dimisión del vicepresidente deportivo, Robert Reid, por “procesos irregulares” y las críticas por parte de David Richards, representante británico en el consejo mundial, han advertido de un profundo malestar en el seno de la organización.
Por otra parte, Ben Sulayem ha tenido conflictos abiertos con pilotos y equipos, desde restringir a los reporteros la lengua que deben usar en las entrevistas hasta una investigación por manipulación de resultados, aunque finalmente fue exonerado. No obstante, la credibilidad del directivo está dañada por esos episodios y por unos antiguos comentarios que algunas partes consideran misóginos y que han vuelto a la luz pública.
La llegada de Sainz a la presidencia es vista como una oportunidad para resetear el liderazgo de la FIA y construir una relación más fluida con los actores clave del automovilismo, incluidos equipos, pilotos y patrocinadores.
Carlos Sainz y su visión global
La candidatura de Carlos Sainz sería un movimiento estratégico con repercusiones globales. Su experiencia como competidor, su cercanía al mundo de la Fórmula 1 y su trayectoria en diferentes disciplinas del motor le otorgan una perspectiva integral del ecosistema automovilístico.
A pesar de que existen otras posibles candidaturas, como la de personalidades emergentes del mundo del motor, ninguna tiene a día de hoy el mismo grado de consenso que Sainz. Su más que probable elección podría inclinar la balanza en un instante crítico para la FIA, que busca recuperar a cualquier precio la confianza de los que la integran.
La elección será clave para el futuro del automovilismo internacional; en el caso de que Carlos Sainz diera el paso adelante, no solo sería el primer español en presidir la FIA sino que también podría ser el presidente que restableciera la estabilidad, la modernidad y la transparencia en la institución máxima del motor.