«He tenido un finde difícil en Bakú, pensaba que no podía empeorar, pero…». Charles Leclerc estaba equivocado. Es la frase con la que arranca un cómico video de 40 segundos que posteó en su cuenta de Instagram anoche, de vuelta a casa tras terminar noveno en el Gran Premio de Azerbaiyán. En el documento aparece Carlos Sainz, que había firmado unas horas antes su primer podio con el equipo Williams, conduciendo un vehículo de calle esta vez. No un monoplaza de Fórmula 1.
Es de noche, nadie sabe hacia dónde se dirigen aunque el humor y la complicidad entre ambos pilotos no falta a pesar de la situación que están viviendo. Siguen llevándose de maravilla, por cierto, pese a haber dejado de ser compañeros de equipo este año. Queda clarísimo en el video. «Estamos en una van», continúa el monegasco, que ejerce de copiloto en este story que se ha hecho viral debido a lo rocambolesco de la situación. Sainz y Leclerc a veces comparten jet privado para volver a casa, como sucede con otros pilotos de la parrilla pues la mayoría viven en Mónaco, aunque esta vez el viaje se les complicó por culpa de factores meteorológicos.
Empezaron compartiendo avión pero no pudieron realizar el viaje completo y tuvieron que detenerse antes de hora. «¿Dónde estamos Carlos?», sigue preguntando el piloto de Ferrari, noveno en cruzar la línea de meta en Bakú tras un fin de semana complicado y que Lewis Hamilton no le dejara pasar en el último segundo cuando el equipo Ferrari se lo había pedido. «Estamos en medio de Italia», le responde Sainz mientras se ríe y conduce el vehículo. A la vez, es enfocado por el teléfono del monegasco, que también graba la carretera de noche. Oscurísima.
Una tormenta les amargó
«¿Por qué?», le insiste Leclerc, que le pide detalles de la historia para satisfacer a los más de veinte millones de seguidores con los que cuenta en Instagram. Quieren saber más: cómo y por qué han terminado así. Sainz lo termina aclarando entre carcajadas de ambos: «No hemos podido aterrizar en Niza (al lado de Mónaco) por una tormenta, así que hemos tenido que aterrizar en medio de Italia, hemos alquilado una van y ahora vamos de camino a Mónaco».
«Ah, está muy bien», asume el monegasco. Lo mejor del video es el cierre del mismo, cuando ambos pilotos muestran la química que todavía mantienen, para aquellos que dudan sobre el estado de su relación tras la salida del madrileño de Ferrari. «Dos horas de trayecto lo haremos en una hora y media», deja caer Sainz, que parece que tiene cierta prisa por volver a casa. «No, no», le responde Leclerc sin demasiada fe. Parece que apoya la idea de su amigo. «No, nunca», termina cerrando Sainz.
La carrera del madrileño fue de cuento de hadas, mostrando un brillante ritmo durante toda la prueba para terminar en una meritoria tercera posición, pero su vuelta a casa no fue tan bonita y se le complicó. Suerte que vivió la aventura de la mano de su amigo Leclerc para poder contar y compartir la anécdota entre risas.
