El Real Madrid aspira al Top 8 de la Champions League. En las cinco primeras jornadas de la Fase de Liga de la ‘orejona’, el cuadro merengue ha cosechado 12 puntos de 15 posibles. Su único tropiezo, Anfield, ha quedado en el pasado tras superar el infierno del Olympiacos. Pero ahora, hay que mirar hacia delante. Actualmente quinto en la tabla general, los pupilos de Xabi Alonso tienen tres finales por delante para asegurar su billete en primera clase para los octavos de final. El curso pasado, con Carlo Ancelotti, los blancos tuvieron que pasar por el playoff. Este año, lo quieren evitar. Quedan dos partidos en casa, y uno fuera. Lo más duro está hecho, aunque todavía queda un pez gordo.
¿Cómo le fue al Real Madrid hasta ahora?
El Real Madrid ya ha hecho lo más duro. En sus cinco primeras jornadas de la Champions League, el club merengue ya ha disputado tres de las cuatro salidas que tenía que disputar. Empezó con el partido en Almaty, en Kazajistán. A más de 8.000 kilómetros de la capital española. El viaje más largo de la historia del Madrid en la ‘orejona’. Era el típico partido trampa… pero los blancos supieron salir de allí con un 0-5 y un hat-trick de Kylian Mbappé.
La segunda salida fue la más complicada: Anfield. En el Merseyside, Xabi Alonso y sus pupilos cayeron ante uno de los peores Liverpool de los últimos cinco años. En el estadio ‘red’, el Real Madrid apenas creó peligro: llegaron dos veces a puerta… y ya. Los madridistas también pudieron dar las gracias a Thibaut Courtois, quien salvó los muebles con ocho paradas espectaculares.
La última salida tampoco fue la más fácil. Aunque el Olympiacos llevaba con solamente dos puntos en cuatro partidos a la cita ante el Real Madrid, el equipo dirigido por Mendilibar supo darle problemas al 15 veces campeón de Europa. Chiquinho abrió la lata antes de que Kylian Mbappé haga caer su furia encima del Estadio Georgios Karaiskakis. Los de Pireo casi remontan, pero no pudo ser. Resultado final, 3-4.
El Santiago Bernabéu fue el fortín del Real Madrid este curso. Hasta ahora, ya sea en Liga o en la Champions, los blancos todavía no saben lo que es perder en su coliseo. Ni siquiera empatar. En la Champions, los hombres de Xabi Alonso ya recibieron a grandes peces como el Olympique de Marsella o la Juventus. En ambos casos, ganaron por la mínima (2-1 y 1-0). Pero los deberes han sido hechos.
Su hoja de ruta para los próximos partidos de Champions
Pero todavía quedan tres partidos. El próximo, en el papel, será el más complicado. El 10 de diciembre, el Real Madrid recibe al Manchester City de Pep Guardiola. Volveremos a ver el choque de titanes entre Kylian Mbappé y Erling Haaland. Será un encuentro muy disputado. En las cinco últimas temporadas, los caminos de los merengues y de los citizens siempre se han cruzado. Este año, volvió a ocurrir. Actualmente 9° en la tabla de la Champions (10 puntos), los skyblues llegan con un espíritu de revancha tras la eliminación del curso pasado. Aunque vienen de dos derrotas consecutivas (Bayer Leverkusen y Newcastle en la Premier), nunca hay que dar por muerto al gigante del Etihad.
Si el Real Madrid consigue sacar vivo de su enfrentamiento contra el City, habrá hecho lo más duro, definitivamente. Porque después de la visita de Pep Guardiola, al Madrid sólo le faltará jugar el Mónaco en el Santiago Bernabéu (20 de enero de 2026) y ante el Benfica (27 de enero), como última salida de la Fase de Liga. Por ahora, los monegascos son 23° de la tabla –penúltimo clasificado por el playoff– y se la jugarán todo en Chamartín. No habrá que subestimarles, aunque los blancos están, en teoría, un paso por encima. Y para rematar, el viaje a Lisboa para reencontrarse con José Mourinho. Las águilas de Da Luz acaban de sumar sus primeros –y únicos– puntos en la Champions tras derrotar al Ajax en su campo. Xabi Alonso no podrá fallar.
El Real Madrid no se la puede jugar. Todavía quedan 15 puntos por distribuirse. Puede pasar de todo. Si el Real Madrid pierde uno de estos tres encuentros, su presencia en el Top 8 podría verse comprometida. El objetivo es ahorrarse el playoff y llegar lo más fresco posible a los octavos de final. Xabi Alonso tiene una misión y deberá cumplir con ella.
