Esta semana, la Liga Santander contará con una jornada intersemanal que proporcionará al espectador un derbi madrileño. El miércoles -28 de febrero- el Metropolitano se vestirá de gala para recibir al Leganés, en estos momentos ambos clubes viven diferentes situaciones. Los locales viven una situación especial donde se les plantea la posibilidad de dificultarle (disputar) al FC Barcelona -intretable- la competición; en cambio, los de Garitano -si no vencen mañana- cumplirán un mes sin sumar tres puntos en un partido de liga.
Los ‘colchoneros’ vienen de vencer al Sevilla FC con un marcador bastante sorprendente, los de Simeone vencieron por cinco goles a dos al equipo dirigido por el técnico italiano. Este partido fue considerado para muchos uno de los mejores partidos de la temporada para los rojiblancos.
Un encuentro donde su jugador baluarte –Griezmann– realizó una actuación impecable, con el que consiguió anotar tres goles y una asistencia, de este modo el francés afirma su gran nivel de forma a diferencia de la paupérrima versión con la que inició la temporada. Aún así, debemos destacar como la plantilla ha sufrido varias pérdidas, las últimas constan de la marcha de Gaitán y Carrasco -ambos al exótico fútbol chino-. Por lo tanto, el entrenador argentino únicamente cuenta con una plantilla configurada por 20 jugadores -tres de ellos porteros-.
A pesar del reducido número de efectivos, tratándose de un gran club, el conjunto sigue sumando victorias. Y hoy por hoy, es el único capaz de mantener en tensión a los de Valverde en la lucha por la liga, además de continuar con sus posibilidades intactas en la Uefa Europa League.
En su contra, los ‘pepineros’ fueron una de las mayores sorpresas de la Copa del Rey (eliminando al Real Madrid) alcanzando las semifinales de esta competición, un hecho histórico para el Leganés. A partir de su eliminación en dicha competición comenzó a sumar malos resultados, donde el mejor resultado obtenido fueron empates.
Garitano es consciente de la necesidad de retomar la senda de la victoria para evitar males mayores. Los méritos obtenidos por este modesto club en los últimos años son fascinantes y sin ninguna duda saltarán -de estreno- al Metropolitano con la intención de alzarse con la victoria.
Un derbi donde son conscientes de no contar con el favoritismo pre-partido, pero ya hemos podido presenciar, desde la llegada del técnico vasco al conjunto ‘pepinero’, un equipo compacto y luchador caracterizado por la alta dificultad de poder hacerle gol. Falto de gol, pero muy oportunista en ataque. Un equipo que se dejará el alma por la consecución de la victoria.
El derbi de mañana va a estar marcado por la similitud entre equipos en su estilo de juego, más allá del nivel de las plantillas. Ambos entrenadores son unos expertos en la configuración de una defensa férrea en la que basan buena parte de los cimientos del equipo. Probablemente, presenciaremos un duro envite con una alta intensidad con una prioridad común: la victoria.