Celta y Leganés abren este viernes en Balaídos la décimo-quinta jornada de la Liga Santander. Dos equipos que vislumbran brotes verdes tras un punto de inflexión en sus malas rachas con las que iniciaron la campaña, que sirvió para el cambio de mando en los locales y para abandonar el farolillo rojo por parte de los visitantes.
El Celta puede conseguir enlazar por primera vez en la presente temporada 3 victorias consecutivas. La temporada pasada, lo consiguió una sola vez entre las jornadas 19 y 21, tras superar a domicilio a Levante y Real Sociedad por la mínima y al Betis en su propio feudo. Los vigueses son otros tras la llegada del portugués Miguel Cardoso, quién recibió sus primeras críticas tras «retirar» al equipo del escenario de la Copa del Rey a las primeras de cambio, al presentarse en Anoeta con un equipo plagado de jugadores menos habituales y argumentando a posteriori en que «no están preparados para afrontar dos partidos semanales».
La enfermería celeste se vacía, con la inclusión en la lista de 18 hombres, del eslovaco Stanislav Lobotka, maltrecho del tobillo desde el 1 de noviembre. El único que figura en el parte médico es el danés Matías Jensen, prácticamente inédito en el verde desde que se enfunda la casaca celeste. La impronta del preparador del país vecino, está perjudicando a los defensas sudamericanos, abocados al ostracismo partido tras partido, como son los casos del señalado Roncaglia y del paraguayo Júnior Alonso (ambos fuera de la convocatoria). Además del zaguero no canterano con más recorrido por el Lagares, como es el caso de Gustavo Cabral.
El Leganés abandonó el farolillo rojo, tras la sorprendente y balsámica victoria en Butarque ante el Fútbol Club Barcelona en la jornada intersemanal del mes de septiembre (foto arriba). A raíz de ese cambio de dinámica, los pepineros sólo cosecharon una derrota en los últimos diez partidos -frente al Levante en el Ciutat por 2-0-. Además, el anterior desplazamiento de los pupilos de Mauricio Pellegrino, supuso el necesitado primer triunfo a domicilio de los suyos -en Zorrilla, 2-4-.
Los madrileños acuden a Balaídos con numerosas bajas de diversa índole. Por sanción, Rubén Pérez, al ser expulsado en el derby ante el Getafe, al igual que el asistente del tanto blanquiazul, el francés Nyom, que vio su quinta tarjeta amarilla. En lo tocante a lesiones, se perderán el encuentro los defensas Ezequiel Muñoz y Rodrigo Tarín, el centrocampista argentino Szymanowski y el ariete uruguayo Michael Santos.
Dos victorias para cada uno en el pasado
En lo que a enfrentamientos entre ambos contendientes se refiere, hay una máxima igualdad. El Leganés no podrá olvidar su debut en la máxima categoría, cuando el 22 de agosto de 2016 venció en Balaídos con un solitario tanto del sevillano Víctor Díaz a la salida de un saque de esquina (celebración en la imagen superior). El Celta se llevó los 3 puntos en el primer encuentro de la segunda vuelta disputado en Butarque (0-2). Ya en el curso pasado, ambos equipos solventaron sus respectivos envites como locales, con una diferencia exigua (1-0).
Impartirá justicia el jienense Jose Luís Munuera Montero, con quién el Celta nunca ganó y «vetado» por la entidad olívica desde el escándalo de Ipurúa de la temporada 2016/2017. En la sala del VAR estará el pamplonica Eduardo Prieto Iglesias, que el pasado lunes tuvo una desafortunada actuación en San Mamés, decretando en el descuento como penalty un «piscinazo» de Muniaín, a la postre determinante para que el Athletic cortase su sangría histórica de encuentros sin vencer.
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