A punto de finalizar este año de 2018 es momento para hacer balance de lo que ha dado de sí este periodo para el San Fernando CD. Y al contrario que el año anterior, donde catalogábamos el año como de montaña rusa peligrosa, en éste no se han sufrido esos vaivenes y prácticamente todo lo que rodea al club ha ido en línea ascendente con el único pero de algunos problemas surgidos con el Patronato de Deportes del Ayuntamiento isleño.
Comenzaba 2018 con el equipo en puestos de promoción de descenso después de la primera vuelta de la temporada pasada. Un empate a cero goles en el primer partido del año en Villanueva de la Serena fue suficiente para salir de ese peligroso puesto. Ese fue el puesto más bajo de toda el año, ya que con esa igualada bastó para salir del play out y no volver en todo el 2018 ni a él ni a los de descenso directo, algo muy pero que muy meritorio tal y como comenzó esa temporada.
Una temporada que más adelante incluso permitió soñar con disputar la Copa del Rey hasta prácticamente el último partido ante el UCAM. Por lo que cabe calificarla de muy positiva y que además sirvió para asentar bien los cimientos de lo que sería la próxima. Para ello se comenzó a trabajar muy pronto y nada más comenzar el verano por parte de la directiva se anunciaba los refuerzos y la continuidad del míster y de la columna vertebral de la plantilla.
Todo sonaba a música celestial y a un proyecto ilusionante… hasta que llegó el día de comienzo de los entrenamientos de pretemporada. Por parte del Patronato de Deportes del Ayuntamiento de San Fernando se prometió replantar el maltrecho césped del Iberoamericano. Dicha mejora no finalizó en la fecha prevista y toda la pretemporada, entrenamientos y partidos amistosos, se tuvieron que celebrar lejos del estadio isleño. Ello conllevó multitud de problemas, tanto deportivos como económicos. Incluso para los dos primeros partidos ligueros tampoco estuvo a tiempo el estadio isleño teniendo que buscar acomodo en Chiclana y Jerez de la Frontera para poder disputar sendos encuentros. Pero todo problema si eres capaz de superarlos, te hace más fuerte. Y eso es lo que ocurrió con el club azulino.
Comenzó la nueva campaña y con dicho problema sufriéndolo en las carnes del equipo, pero éste hizo piña y se mantuvo más unido que nunca. Se consiguieron resultados muy meritorios lo que hizo que el objetivo con el que se comenzó la temporada en curso, permanencia, se encuentre actualmente a doce puntos de distancia. Casi, casi se comienza a mirar ya a otros objetivos más atrevidos que a aquel con el que se comenzó allá por agosto. Cada vez más, hay licencia para soñar con este San Fernando.
Los números del año también lo demuestran. Se han disputado durante todo el 2018 35 partidos oficiales, de ellos 13 han sido victorias, 14 empates y 8 derrotas. Se han anotado un total de 38 goles y encajado 30. El máximo goleador del San Fernando CD en el año a punto de finalizar ha sido Pedro Ríos con 10 goles, seguido de Carri con 6 y Pau Franch y Javi Casares con 5.
Fin de año, pero no fin de ciclo. Ya se ha comenzado a trabajar en que esas bases sean aún más sólidas para próximas temporadas y se han anunciado renovaciones de jugadores con mucho futuro y fútbol en sus botas como Raúl Palma o Carri. Se sigue trabajando, se sigue soñando, se sigue ilusionando para que con ello en el futuro resumen del 2019 o el de algún otro año venidero igual hablemos de confirmación y realidad en vez de ilusión y sueño. Mientras tanto, no despertemos al club isleño y a la afición azulina.