Alfredo Ortuño evita la derrota carbayona ante el Extremadura

El Real Oviedo sigue sin ganar. El conjunto asturiano no pasó del empate ante el Extremadura en una jornada especial para la capital del Principado de Asturias, pues se celebra durante la misma tarde la tradicional celebración del Día de América en Asturias.

El Carlos Tartiere recibía a su nuevo patrón en una cita que contaba con una entrada baja debido a la coincidencia con la fiesta anteriormente mencionada. El anterior técnico del exitoso Real Oviedo Vetusta (filial), Javi Rozada, se ponía a los mandos de la entidad azul para intentar resurgir al equipo y olvidar el mal inicio de año con el entrenador argentino Sergio Egea. Mejores sensaciones traía el Extremadura, ya que su juego es mejor pese a que los resultados tampoco eran positivos.

La tecnología salva al Oviedo

El comienzo del partido iba a ser de todo menos tranquilo, ya que el Real Oviedo recibía un golpe duro por parte del Extremadura aunque contó con un final extraño y salvador. En el minuto 4 un tiro del delantero Álex López iba a ser parado por Nereo Champagne. En el rechace el conjunto asturiano se introducía la pelota en propia portería debido a un despiste monumental de Alejandro Arribas y Diegui Johannesson. Era el 0-1 de la forma más cómica posible, pero la tecnología iba a salvar al Oviedo. Se señalaba un fuera de juego en la carrera del ariete catalán y el tanto era anulado por el colegiado. 

Tras el “milagro tecnológico” las cosas no cambiarían en demasía para los locales. Los pupilos de Manuel Mosquera eran superiores, y el juego entre los talentosos Víctor Pastrana y Kike Márquez superaba a un desconcertado equipo ovetense. Mejorarían los de Rozada con el aumento de ritmo de juego, y tras un saque de esquina llegaba el primer buen momento. Un remate al larguero de Arribas y el disparo fuera de Edu Cortina en el rechace ponía contra las cuerdas al rival.

El primer tiempo avanzaría y el Real Oviedo mejoraba con ello. Empezaban las combinaciones de peligro y gracias a Saúl Berjón y Yoel Bárcenas el partido cambiaría de dominador. No serviría para alterar el luminoso, pero mejoraba la imagen carbayona de toda la temporada pues el equipo parecía nuevo en esos 20 minutos y practicaba el mejor fútbol.

Ortuño evita el desastre

La segunda mitad repetía la tónica del final de los primeros 45 minutos. Balón del equipo local con ocasiones repartidas. Por ejemplo, un remate de Ortuño parado por Casto o un genial tiro de Pastrana respondido con brillantez por el meta Nereo Champagne. El argentino iba a seguir siendo protagonista y tendría un error en la salida de balón que terminó con una peligrosa ocasión de Nono.

Los errores persistirían en el equipo asturiano hasta desembocar en la peor noticia. Un fallo en la salida de balón de Jimmy Suárez propiciaría un robo de David Rocha. El ex-oviedista pasaba la pelota a un Kike Márquez que demostraba su talento. Regateaba con solo un toque a Diegui y antes de la llegada de los centrales disparaba a la red. El “10” del Extremadura abría el marcador y hundía a un Real Oviedo perjudicado por sus propios errores.

Los nervios se apoderaban del Real Oviedo, que buscaba el gol a la desesperada. La tónica eran los centros que llevaban peligro, y gracias a ello las cosas cambiarían. Una jugada entre el recién entrado Borja Sánchez y Berjón terminaría con el capitán poniéndole la pelota a Ortuño. El pichichi azul remataba de cabeza y batía a Casto Espinosa. Empate y alivio en la afición carbayona con las tablas en el marcador tras el tanto de Kike Márquez.

No se movería más el electrónico, terminando el partido en 1-1. Con este resultado, el Real Oviedo se mantiene último en la tabla clasificatoria. En la próxima jornada, los de Javi Rozada viajarán al Toralín, que a buen seguro recibirá a mucha afición asturiana. Por su lado, el Extremadura 3 puntos y se sitúa dos puestos por encima de su rival en esta jornada. Su próximo partido será en casa contra uno de los grandes de la categoría, la todopoderosa Sociedad Deportiva Huesca.