Darío Brizuela se despidió ayer de su ex club, el Movistar Estudiantes, para poner rumbo al Unicaja Málaga. El jugador publicó ayer una fotografía en la red social Instagram en la que agradecía al club todo lo que había hecho por el hasta el momento.
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Con este texto, Brizuela quiso decir adiós al club de sus inicios como jugador de baloncesto.
El de San Sebastián debutó en la Liga Endesa en la temporada 12-13 con 18 años, en este momento se encontraba jugando en el equipo EBA del Estudiantes, pero disputó dos partidos con el primer equipo. No fue hasta la campaña 15-16 cuando se ganó un puesto en el primer equipo, disputando 33 partidos y anotando más de 500 puntos en el equipo Madrileño.
Gracias a sus actuaciones con Movistar Estudiantes, Brizuela pudo debutar en la selección absoluta en julio de 2018, en el periodo de las ventanas FIBA, en un partido contra Bielorrusia.
Durante las ocho temporadas que el jugador ha militado en las filas del conjunto estudiantil se ha visto una gran progresión en su juego. Brizuela ha aprendido a asumir el liderazgo del equipo y se lo ha echado a la espalda en numerosas ocasiones.
La temporada pasada, el jugador vasco fue la figura central del Estudiantes, siendo importante en prácticamente todos los partidos en los que disputó algún minuto. Además de esto, Brizuela ha protagonizado grandes momentos con la camiseta celeste, como los 31 puntos que le anotó a Valencia Basket.
Darío Brizuela abandona el club estudiantil en un momento muy complicado, hay dudas de que el conjunto madrileño vaya a seguir en pie la temporada que viene debido a la cantidad de deudas que este posee. La salida del jugador supone otro golpe para Estudiantes. Deberá decidir si invertir el dinero que ha obtenido del traspaso en fichar otro jugador que asuma galones en el juego o, por otra parte, confiar en los jugadores que ya tiene en plantilla.
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