David Barral (San Fernando, Cádiz, 10 de marzo de 1983), veterano delantero del fútbol español que a día de hoy milita en el Racing de Santander en LaLiga Smartbank, habló en el programa de la Cadena Ser «El Larguero». En sus breves declaraciones, recogidas por el medio cántabro «Aquí Hay Pelotas», habló sobre la situación que vive en la actualidad el país, en concreto el fútbol español y también ha manifestado su postura sobre el futuro de la competición.
El ariete gaditano se suma a los muchos jugadores del fútbol español que no quiere que se reanude la competición hasta que la situación se calme. Barral afirmó que todos los jugadores están «dolidos por todo lo que está sucediendo, así que ahora el fútbol es secundario y lo primordial en este momento es la salud de todos los españoles».
Respecto a la vuelta al fútbol, el delantero racinguista es claro diciendo que «si se tiene que terminar la temporada que se acabe y que decidan los organismos competentes qué hacer con la competición». En este aspecto añade también que no se debe poner en riesgo a nadie. Por lo tanto, «si hay que esperar hasta julio o agosto a que empiece la pretemporada se espera».
Un terreno que se baraja en el fútbol español es el de jugar partidos cada 72 horas para así terminar rápido las competiciones. En este supuesto, el ariete no vería con malos ojos disputar encuentros cada tres días. Sin embargo aclara que, «antes de eso habría que hacer una buena preparación para la alta competición, ya que ahora el cuerpo no está preparado y los encuentros parecerían de solteros contra casados».
Por último, se habló de la posibilidad de jugar partidos a puerta cerrada. Una medida que permitiría reanudar el fútbol pero sin poner en riesgo a miles de aficionados. Con respecto a esto, David Barral, siguiendo la misma línea de los jugadores de la plantilla racinguista, afirma que, «yo siempre he sido un futbolista de vivir el ambiente, así que sin afición no tiene nada que ver, pero habrá que acatar lo que dicen los jefes». No obstante terminó dejando claro que «ningún jugador va a querer jugar sin público».