«Todo sigue igual, todo sigue igual que ayer», dice la letra de un tema de rock muy conocido para nosotros, lo que también hoy nos resulta muy cotidiano es el aislamiento obligatorio que estamos llevando a cabo desde el pasado 20 de marzo, cuando todo o casi todo quedó frenado por este mal mundial, que está pasando en nuestro lugar con más fuerza por los contagios masivos y el deporte en general no es ajeno a todo esto.
Los problemas se presentan día tras día en el ámbito deportivo, a la falta de competencia y la poca probabilidad de entrenamientos normales, lo económico es lo que ahora impera, en el fútbol son pocos los profesionales que pueden darse el lujo de mantenerse sin recibir sus sueldos, la gran mayoría, futbolistas con una carrera corta, juveniles con primeros contratos y si hablamos de los clubes de las categorías del ascenso y las ligas del interior todo es más caótico y desesperante.
Más allá de las ayudas externas que reciben los futbolistas, ahora se puso sobre la mesa la posibilidad de frenar contrataciones y renovaciones de muchos de los futbolistas de cada institución, la dirigencia tiene la potestad legal de hacer uso de esas opciones, puesto que los vínculos de muchos futbolistas culminan el próximo 30 de junio, desde la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), solo se manifestó por la finalización de todos los torneos a pesar de que todavía no se sabe realmente cuando volverá la práctica profesional y la anulación de descensos, los ascensos se dirimirán en torneos reducidos. Es así que muchos futbolistas salen hoy al cruce de la AFA y también de Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA), que apoya a la entidad que rige nuestro fútbol, exigiendo que los contratos se estiren en el tiempo, para palear el mal momento vivido por la gran mayoría de los profesionales de este deporte, en primera división son 209 los que terminan sus contratos con sus actuales clubes, algunos deben volver a sus equipos originales ya que se encuentran a préstamo, pero el resto quedará libre y con pocas posibilidades de encontrar otra institución que requiera de su participación y si hablamos de los clubes con poco poder económico de categoría inferiores la cuestión es más agobiante, es así que todo se vuelve cuesta arriba para muchos.
Mientras tanto la solidaridad se puede ver en las colectas, ollas populares y reparto de alimentos y elementos de limpieza, por parte de autoridades y también por clubes barriales y es de destacar porque son ellos los que menos tienen y los que más hacen por sus semejantes.
Nada se sabe de la fecha exacta de la vuelta del fútbol en el país, si bien en Europa ya se comienza con los entrenamientos restringidos, hay que tener en cuenta que la pandemia llegó allí antes que a este continente y es ahora cuando aquí viviremos la parte más complicada, lo peor está a la vuelta de la esquina y el fútbol lo palpa al igual que toda la sociedad, que extraña la pasión que se desplegaba cada fin de semana en todos los rincones del país, con esperanzas en sus propios clubes, esa misma esperanza hoy está depositada en transcurrir lo más rápido posible este gran mal que estamos viviendo, el fútbol, el deporte y la sociedad entera, nuestro mayor deseo es poder llegar al día en que veamos como hace un tiempo los estadios llenos pasión y alegría, aunque sin olvidarnos de los que se fueron por este maldito virus.
Escrito por: @DanielBarone11
Foto: Daniel Barone