Lo que va bien en el campo, no funciona en los despachos. El Barça tiene una doble cara esta temporada. Por un lado sobre el verde todo ha ido sobre la seda soñando con el triplete ante el último suspiro y, aunque la eliminación de Champions League ha sido un auténtico batacazo, la temporada pinta a acabar, cuanto menos, con un notable alto. Donde se sigue suspendiendo es en los despachos donde el conjunto azulgrana no ha sido capaz de solucionar sus problemas con el límite salarial.
Un problema que complica el mercado
No es algo nuevo. En las últimas ventajas de fichajes el Barça ha tenido problemas para pujar con la competencia y para poder cerrar operaciones clave ya no tanto por falta de dinero, sino por la imposibilidad de inscribir a los jugadores para competir. Sin ir más lejos el tema de Dani Olmo y Pau Víctor que necesitaron de una cautelar para ser inscritos.
El conjunto azulgrana se había garantizado la regla del 1:1 gracias a la adjudicación de los palcos VIP, sin embargo, esta operación fue cuestionada y una auditoría externa señaló que los 100 millones de euros de la venta de los 475 asientos VIP no podían computar en esta temporada al no ser aún un ingreso real del club.
Ese es el principal problema con nombres como Rashford o Jonathan Tah que han expresado su interés en recalar en el Camp Nou en múltiples ocasiones, pero por no hay espacio para ellos al igual que sucede con algunas renovaciones vitales como la de Lamine Yamal, Jules Koundé o Raphinha aún por cerrar.
Cambio de rumbo
Esta situación ha hecho al Barcelona replantearse algunos objetivos de cara al mercado de fichajes. Asuntos que eran prioridad hace solo unas semanas han quedado aparcados ya no solo por las complicaciones económicas sino también por que hay varios jugadores que han dado un golpe en la mesa reivindicando que el refuerzo está en casa sin acudir al mercado.
Uno de los casos está en el lateral izquierdo. Ahí Alejandro Balde es indiscutible y desde el Barça se pretendía buscarle competencia en el mercado de fichajes para poder administrar así sus minutos y evitar males mayores como en la actualidad que vuelve este find e semana tras un mes de lesión. En la plantilla su reemplazo natural es Gerard Martín que no tenía la confianza plena del club, pero que en el mes de ausencia de Balde ha demostrado que se puede confiar en él ofreciendo un gran rendimiento en grades citas. Sin ir más lejos, el canterano puso dos asistencias a Dani Olmo y Eric García en el duelo de Champions ante el Inter de Milán.
Lo mismo sucede con el ataque. Han sido muchos los nombres que han ido sonando en los últimos meses para ser el heredero de Robert Lewandowski. El delantero polaco aún está a un gran rendimiento y en Can Barça se cuenta con él, pero su edad hace necesario dosificar minutos y se busca un hombre que pueda cumplir esa función y acabar siendo el 9 de referencia.
En las últimas semanas, ante la baja del delantero, Ferran Torres ha ganado protagonismo ejerciendo de falso 9 y demostrando que lo que se necesita ya está en casa. Sus números lo han convertido en el mejor plan B para Hansi Flick y que podría hacerse plantear a un Laporta, que no hace mucho lo quiso vender, que el jugador podría ser el 9 de futuro en el Barça.
Simeone al acecho
Un cambio de idea de Laporta que podría volver a dar un giro al ser tentado desde fuera. Y es que son varios los medios que en los últimos días publican que el Atlético de Madrid tiene en la mira a Ferrán Torres para la próxima temporada. El delantero español es una de las prioridades del club, con una oferta de 30 millones de euros sobre la mesa para ficharlo.