Cristhian Stuani permite al Girona seguir soñando con el ascenso

Girona FC y Cádiz CF se enfrentaban en el estadio de Montilivi en un partido correspondiente a la cuadragésimoprimera jornada de LaLiga Smartbank. Los locales querían asentar su plaza en el playoff de ascenso y, por qué no, seguir soñando con la subida a los cielos de manera directa, mientras que los visitantes llegaban convertidos en equipo de primera división.

Un hombre que aún no conoce la derrota en el banquillo blanc-i-vermell, Francisco, salió con toda la carne en el asador. Quería evitar a toda costa que los tres puntos se escaparan una vez más de su feudo, después de que el Lugo lo lograra la pasada jornada en los últimos suspiros. Por su parte, Álvaro Cervera introdujo muchísimas rotaciones en su once titular una vez consumado el ascenso. Tan solo dos hombres repitieron actuación, Cifuentes y Sergio González. Además, el joven lateral de 20 años Marc Baró debutó con la camiseta de color amarillo.

Cosas de Cristhian Stuani

El partido comenzó abismalmente trabado. No se conseguían enlazar más de tres pasos consecutivos y los guardametas bien podrían haber tardado diez minutos más en salir de túnel de vestuarios, pues su presencia no se había notado. Precisamente, a escasos segundos de llegar al minuto 10, el Girona se aproximó por primera vez a la portería rival. Un pase larguísimo de Granell recorrió por vía aérea más de medio campo y aterrizó en las botas de Borja García, completamente solo penetrando el área. Borja asistió en paralelo a Stuani y el uruguayo solo tuvo que empujar el balón. El Girona no celebró el gol y el VAR se encargó de ratificar la razón: Borja estaba en posición adelantada y el tanto había sido anulado por fuera de juego.

Una nueva pausa de diez minutos y una nueva aparición del pichichi de LaLiga Smartbank. Antes de llegar a la línea del medio campo, Fali cometió un error garrafal. Gumbau metió la punta para interceptar un pase y recuperar el esférico y Stuani encaró la portería rival. Cifuentes no pudo despejar el balón y dejó la portería completamente vacía para que Cristhian Stuani marcara a placer a la media vuelta. El Girona se adelantaba en el marcador con el primer disparo a puerta del partido. En la jugada inmediatamente posterior, Sergio González cabeceó una falta picada por Jorge Pombo, pero Asier Riesgo pudo contener el peligro sin problema alguno. Hasta el descanso, solo hubo una ocasión más, con una falta directa lanzada por Pombo. El debutante Marc Baró se encargó, por su parte, de frustar un eslálom de Aday Benítez que era sinónimo de peligro.

De penaltis y expulsiones

El Cádiz seguía de resaca tras la celebración por el ascenso y el Girona no era capaz de sacar provecho de su supuesta ventaja. El ritmo era pausado, monótono, lineal y somnoliento, y tan solo una jugada ensayada dirigida por Àlex Granell que pudo bloquear la defensa gaditana supuso un cierto peligro. En el minuto 55, una nueva falta propició el primer disparo a puerta de la segunda mitad. Javi Duarte, quien acababa de incorporarse al terreno de juego, interceptó con la mano un remate de Stuani. Era penalti. Cifuentes adivinó la dirección, pero Cristhian Stuani se encargó de transformar la pena máxima. El conjunto catalán ampliaba distancias con una eficiencia del 100%.

El gol sirvió para activar un poco el motor del Girona. Jairo y Borja García se plantaron dentro del área en ocasiones consecutivas, pero Fali, primero, y un inexpugnable Sergio González, después, se encargaron de bloquear los recortes e impedir una colocación idónea para disparar.

En el minuto 83, Johan Mojica puso al Girona en problemas. Intentando evitar que Salvi Sánchez accediera al balón, le soltó un manotazo cerca de la línea de fondo. Tras revisarlo con el VAR, Alejandro Muñiz Ruiz decretó el penalti y procedió a expulsar al lateral colombiano por doble amonestación. Álex Fernández no falló y acortó distancias con su gol número 13 de la temporada. Poco antes de entrar en el tiempo añadido, Alberto Perea también fue expulsado por protestar. El partido aún no había terminado y, en el mínuto 93, Álex Fernández tuvo la ocasión más clara de todo el encuentro con un cañonazo desde la frontal del área que salió lamiendo el larguero.

Finalmente, el partido acabó con victoria local por 2 a 1. En un encuentro con limitadas ocasiones, el estado de gracia de Cristhian Stuani certificó que los catalanes disputarán el Playoff de ascenso a primera división. El Girona se coloca en cuarta posición, con 63 puntos. Por su parte, el Cádiz se mantiene líder de la competición, con 69 puntos.