Volvió el Sevilla a su competición favorita y puede hacer historia ganando su sexto título de Europa League. Partido complicado para los españoles que no fueron tan superiores como contra la Roma, aunque supieron controlar los últimos minutos de manera brillante.
El choque se le puso de cara a los «red devils» en el minuto 8. Diego Carlos arrolló a Rashford tras una buena intervención de Bono. Bruno Fernandes ejecutó con mucha sangre fría, dando un salto justo antes de disparar y así distraer al meta sevillista.
El United, que se encontraba mejor, pudo aumentar distancias tres minutos más tarde, pero su balón se fue cerca de la madera. Ocampos lo intentaba por la parte hispalense, pero se encontró con De Gea.
En el minuto 26 Suso pondría la igualada en el marcador. Reguilón arrancó, adentrándose en el área para poner un buen balón a Suso, empatando así la eliminatoria. El gol creció a los sevillistas, que llevaban una mejor dinámica tras despertar del gol contrario.
El último cuarto de hora quedó abierto para los dos, jugando las dos escuadras sus cartas. En el añadido apareció Bono, manteniendo así el 1-1 en el electrónico.
La segunda mitad comenzó como la primera, con una gran intervención del meta rojiblanco saliendo al disparo de Greenwood. El marroquí tuvo que aparecer en un par de ocasiones más (minuto 50 y 53), siendo el jugador más destacado de los de Lopetegui. El Manchester, con un paso más que el Sevilla, estaba buscando el gol de todas formas, pero ahí estaba atento el portero para sostener a los suyos.
El Sevilla se encomendaba a su portero, mientras que el United se mostraba más incisivo en el ataque. Los minutos pasaban, los equipos iban entrando en una dinámica más lenta y parecía que la prórroga podía estar más cerca de lo que se pensaba en la primera parte, con un ritmo más alto.
A falta de veinte minutos para el 90, Jordán disparó una falta próxima al área inglesa, pero su chut se topó con un defensor. El VAR revisó la jugada por una posible mano. Finalmente, la jugada no derivó en nada.
Cuando el partido se le puso más cuesta arriba para el Sevilla, De Jong, que entró en el 55 por Ocampos, apareció para desequilibrar la balanza. Centro de Navas para el ariete sevillista que se adelanta a sus defensores y bate a De Gea.
Los últimos minutos fueron controlados por un Sevilla más acostumbrado a este tipo de partidos. Solskjaer hizo un triple cambio (Fosu-Mensah, Mata y James) para intentar hacer algo a la heroica.
El Sevilla llega a su sexta final de Europa League, en busca de un nuevo título para sus vitrinas, con Monchi en la dirección deportiva como capitán de un barco que sigue navegando y conquistando tierras europeas en su competición favorita.