Narváez hunde al Albacete en el último suspiro

Maños y albaceteños se encontraban en La Romareda estando ambos inmersos en una situación poco deseable: La zona roja.

El partido, al contrario de lo que el espectador podría pensar, comenzó con un juego bastante vertical desplegado por ambos conjuntos. El primer conato correría a cargo de los visitantes después de que Gorosito cabecease un balón muy blando que acabó en manos de Álvarez. Zanimacchia se abría paso minutos después para apuntarle un primer tiro al Zaragoza, aunque se marchó desviado de la portería de Tomeu. Intensidad en los primeros compases del choque cuando se alcanzaba el minuto 10 y empezaba a ganar enteros el Zaragoza. Los de Baraja hacían daño por bandas habilitando centros que no encontraron rematador debido a los despejes de Gorosito y Caballo, pero que denotaban que los maños despertaban y empezaban a hacerse con el control.

Saltaban las alarmas cuando Gorosito se resentía y Boyomo empezaba a calentar, pero finalmente el argentino continuó en el terreno de juego. Toda la intensidad de los primeros minutos se apagó conforme avanzaba el choque para dar paso a un ritmo mucho más lento y poco fluido. El dominio maño también se desvanecía y el tramo se convertía en un duelo mucho más igualado que poco a poco empezaría a cambiar de dominador. El Albacete Balompié comenzaba a apretar mucho más que su rival, ocasionando varias jugadas de peligro.

Zozulya, tras encontrar una laguna entre la pareja de centrales maños, no podía aprovechar un fantástico centro de Álvaro Jiménez y enviaba el balón desviado de la meta de Álvarez. Minutos después sería Carlos Isaac quien se abría paso por banda con un autopase para poner un centro raso que se paseaba por el área pequeña pero al que Zozulya y Liberto no podían llegar. Justo antes del descanso, Diamanka enviaba fuera un remate proveniente de un córner botado por Álvaro Jiménez. Tres ocasiones que dejarían con la miel en los labios a los de Lucas Alcaraz, que habían ido de menos a más y que se iban con la cuenta a 0.

Con estas acometidas finales, Muñiz Ruiz señaló el final de la primera parte sin añadido. Una primera mitad con unos minutos iniciales y finales -sobre todo, estos últimos- bastante intensos. 45 minutos de cara y cruz, con un Zaragoza más dominador al principio y más débil al final, justo lo contrario que el Queso Mecánico. Partido abierto de cara al segundo ecuador y que prometían seguir entreteniendo.

Boyomo, ahora sí, entraba al partido en detrimento de Gorosito, que había visto la amarilla antes del descanso. Jean Jules se animaba nada más empezar con un disparo raso lejano que acababa en manos de Álvarez sin mayor problema. Poco movimiento en las áreas durante los primeros minutos de la segunda parte, en la que los delanteros no encontraban sensaciones de cara a portería. Problemas para Nárvaez en el brazo, con peligro de ser sustituido, pero finalmente continuó en el terreno de juego.

Sí salía Zanimacchia para dar entrada a a Bermejo. Chema Núñez y Javi Navarro se incorporaban en el equipo manchego sustituyendo a Manu Fuster y Liberto en unos claros cambios enfocados a renovar la delantera. Eguaras y Bermejo recibían sendas amarillas tras cortar contraataques del Albacete, que si bien dominaba ligeramente a sus rivales, no conseguía convertir ninguna jugada en algo que pudiese inquietar a Álvarez. Lo intentaba Álvaro Jiménez cobrando una falta que él mismo provocó -amarilla incluida- tras robar un pase en la zaga maña, pero el tiro del cordobés se marchaba desviado por la derecha de Álvarez. Papunashvili, de quien el Albacete no tendrá buenos recuerdos, entraba por Larrazabal para tratar de abrir la lata.

Apretaba un poco más el Zaragoza a partir del 80, haciendo daño por banda izquierda. El despertar del letargo maño acabaría surtiendo efecto para suerte de los de Baraja, y es que en el minuto 89 Nárvaez marcaría el único gol del partido. Un pase al hueco en dirección a la banda derecha dejaba más que solo a Carlos Nieto, que con un pase de la muerte habilitaba a Narváez para definir solo ante Tomeu Nadal con un sutil toque. Euforia en los maños, que con este inesperado gol se atribuían sus primeros 3 puntos de la temporada. Lo intentaron los albaceteños con todo en las últimas, con incorporación de Tomeu a los córners incluidas. El meta balear tuvo el gol en sus manos -o mejor dicho, en su cabeza- en la ultimísima acción del partido, pero envió el balón muy por encima del larguero.

Con este tardío 1-0 se dio por terminado el partido en La Romareda. Tres puntos que, si bien no se han conseguido de la manera más brillante en el Zaragoza, sirven para darle confianza al equipo en este irregular inicio de temporada en el que les está faltando rodaje. Por su parte, el Albacete, a pesar de haber estado más activo en ataque que en otros partidos, sigue pagando muy caro ese poco acierto de cara al gol. Los de Lucas Alcaraz tendrán que mejorar mucho si no quieren estancarse en una dinámica nada prometedora.

Escrito por @ADelValle98