Solo van nueve jornadas y es muy pronto para poder hablar de máximos goleadores, asistentes, porteros menos goleados y demás galardones individuales. Esos que siempre se dan a un jugador, pero que son responsabilidad del equipo en la mayoría de veces. Sin embargo hay una ‘carrera’ de esas que empieza a oler a una pelea de dos, al menos por ahora. La del Trofeo Zamora.
Tras nueve jornadas, Jan Oblak lidera esa clasificación con un coeficiente de 0,29 goles por partido. O lo que es lo mismo, dos goles encajados en siete partidos. Únicamente Jorge Molina y Budimir han logrado batir al guardameta esloveno. Segundo, tras él, con un coeficiente de 0,44 goles por partido está Álex Remiro. El portero de Cascante solo ha recogido cuatro veces el balón de su red y el domingo, con un penalti evitó el quinto ante el Granada. Solo Míchel Herrero, Maxi Gómez, Rafa Mir e Iago Aspas le han logrado batir esta campaña.
Ambos tienen una gran distancia sobre el siguiente en la clasificación, que es Yassine Bono, con 0,72 de coeficiente. La del marroquí, junto con la de Ter Stegen si no se pierde más partidos, son las únicas amenazas que se otean en el horizonte. Pero por ahora, ambos mantienen ese pulso en el que mucho tendrá que cambiar en los próximos meses para que el esloveno o el navarro no estén en esa carrera por el Zamora.