Final a todo o nada en el Alfredo Di Stéfano

El Real Madrid se encuentra ante una situación que pocas veces se ha vivido en el conjunto de Concha Espina. Por primera vez desde que la Champions League adoptase el nuevo formato, el conjunto blanco puede quedar fuera de la fase eliminatoria de su competición. Un hecho producto de una esperpéntica fase de grupos, que hasta el momento se ha saldado con dos victorias, dos derrotas y un empate.

La derrota en el Olímpico de Kiev pareció el punto de inflexión definitivo que dejaría al club más laureado del viejo continente fuera de los octavos de final. Sin embargo, se cumplió el dicho de que nunca hay que dar por muerto al Madrid, incluso cuando no depende de sí mismo. Y es que la victoria del Inter de Milán en el Borussia Park volvió a dar alas al club madridista, ya que no solo le permitiría la posibilidad de acceder a la fase eliminatoria, sino incluso la de terminar como primero de grupo.

Vuelta a la jornada de transistores

El miércoles a las 9 de la noche, se decidirá el devenir de los cuatro equipos del Grupo B, en una situación poco usual: todos pueden clasificarse y todos pueden quedar eliminados. Es por eso que los banquillos, al igual que pasaba hace años en las últimas jornadas de Liga, estarán con los ojos en lo que ocurre sobre su terreno de juego, y los oídos en lo que ocurre en el otro encuentro. Lo que pase en el Alfredo Di Stéfano afecta directamente a lo que ocurre en San Siro, y viceversa.

Los deberes del Madrid son claros: solo la victoria garantiza un puesto en el bombo de octavos. Tras la pésima fase de grupos realizada por el equipo blanco, encontrarse con la posibilidad de depender de sí mismo en esta última jornada es prácticamente un regalo, por lo que salir el campo a buscar de forma única y exclusiva los tres puntos es poco menos que una obligación. Algo que, si se diese, y se complementase con que el Shakthar no se llevase los tres puntos de San Siro, terminaría con el Madrid como primero de grupo.

Por su parte, el Borussia, revelación del grupo y líder durante la mayor parte de la fase de grupos, quiere certificar su presencia en los octavos de final. Algo para lo que, además de la evidente victoria, también le serviría llevarse un punto de Madrid y un empate en San Siro o una victoria de los ucranianos.

¿Podrían estar ambos equipos en la fase eliminatoria?

Es una pregunta que se ha venido repitiendo en los últimos días, y por muy remota que sea la posibilidad, la respuesta es sí. En caso de que hubiese tablas en el Estadio Alfredo Di Stéfano, existe un escenario en el que tanto españoles como alemanes estarían en octavos: la victoria del Inter en San Siro.

Un escenario que advierten desde Italia, pues temen la posibilidad de un alto al fuego sobre el verde de Madrid si ven que los de Conte están haciendo los deberes frente a los italianos. Un resultado que dejaría en la primera plaza a los alemanes con nueve puntos, y segundo y tercero a Madrid e Inter con los mismos puntos, perteneciendo la segunda plaza a los de Zidane gracias al golaverage, y relegando a los italianos a la tercera plaza.

Lo que sí es evidente es que el Madrid recibió sobre la bocina de la última jornada una vida extra que, de no ser aprovechada, puede pasar mucha factura a la plantilla, al técnico y a la directiva. Una bala en la recámara que determinará la diferencia entre poder pelear por todo esta temporada, o que lo que resta de campaña sea una auténtica pesadilla para los blancos.