El Celta se reconcilia con Balaídos

Jugar en Balaídos está siendo sinónimo de problemas este año para el conjunto vigués. Solo ha sido capaz de ganar en una ocasión en casa en lo que llevamos de curso, fue hace dos meses y medio contra el Granada de Robert Moreno. La losa de jugar ante su afición cada vez pesa más y está haciendo mella en la situación del equipo celeste en la clasificación. De un equipo que es un auténtico flan en casa a otro que está teniendo verdaderos problemas fuera. Y es que el conjunto perico es el segundo peor visitante de Primera División. Ha sumado únicamente tres puntos de 24 posibles en sus ocho salidas y solo el colista, el Levante, tiene peores registros en esa faceta.

El balón lo ponía en juego el Espanyol pero el que vio puerta nada más empezar fue el conjunto celeste. Madrugó el gol en Balaídos. Vaya jugadón de Santi Mina. Control orientado precioso tras pase de Javi Galán, pared con Iago Aspas en la frontal, toquecito sutil para orientar el cuero y remate al segundo palo que, pese al toque de Diego López, acabó besando la red. Tras el gol, masticaba las jugadas el Celta. Iba ganando y quería jugar con los nervios de un Espanyol que tenía necesidad de ganar fuera de casa.

Los locales dieron un aviso en el 10′. Filtró Brais Méndez para Aspas y el de Moaña la puso atrás con toda la intención del mundo. No obstante, no había nadie al remate. Tocaban y tocaban los de Coudet en zona ancha. No presionaba el Espanyol, que dejba jugar lejos de su área. La envió fuera Darder. El centrocampista balear se animó con un disparo desde su casa, pero se le marchó muy desviado. Javi Galán y Hugo Mallo avanzaban muchos metros en fase ofensiva y Tapia se incrustaba entre centrales algo que conseguía anular a Raúl de Tomás o Javi Puado.

No producía el conjunto perico en ataque y el Celta seguía presionando muy arriba buscando robar y generar peligro. Querían los catalanes buscar a RDT pero no encontraban el camino. Si encontrarían el camino para tener una ocasión en el último suspiro del primer tiempo. Descargó a la banda RdT, recibió y centró Aleix Vidal y Javi Puado, con un golpeo de primeras, se encontró con una respuesta sensacional de Dituro que mantuvo el 1-0 al descanso en Balaídos.

Al igual que el primer tiempo, el segundo empezó con gol del Celta. El Príncipe de las bateas hacía de las suyas. Buena combinación en tres cuartos entre Cervi, Denis Suárez y el de Moaña, que se fue de fuera hacia dentro y que culminó con un gran remate con el interior ajustado al palo largo, imposible para Diego López. Amplia la renta el conjunto celeste que podría acabar con el gafe de Balaídos.  Pasaban los minutos y a pesar de que Vicente Moreno movió banquillo no encontraba soluciones el Espanyol ante un Celta que seguía muy entero y bien plantado.

La tuvo Brais Méndez en el 62′. Buenísima combinación a un toque del cuadro gallego, Mina la puso al punto de penalti y el internacional español le pegó mal. Poco después, otro aviso más del pontevedrés. Bicicleta, conducción y disparo ajustado que a punto estuvo de entrar. Y lo volvió a intentar Mina. Chutó desde su casa el ex del Valencia buscando la escuadra y no encontró premio por muy poquito.

Apareció Diego López para evitar el tercero. Santi Mina cayó a banda, filtró para Iago Aspas y el de Moaña le pegó durísimo abajo, quizás demasiado centrado. Se entraba en la recta final del partido cuando Denis ponía el tercero y fulminaba al Espanyol. Se acabó lo que se daba. Otra vez más Aspas abrió a la derecha para Hugo Mallo, que se metió en el área y asistió a Denis Suárez. El ‘6’ celeste, con toda la parsimonia del mundo, la mandó a la jaula con un toque sutil. 

Maquilló el resultado el Espanyol en el último suspiro con un golazo de Loren. Sorprendió a todo Balaídos con un disparo desde el centro del campo que supera por alto a Dituro. Como decíamos cuando llegó el tercero, se acabó lo que se daba. El Celta sabe ganar en Balaídos y lo hizo imponiéndose de principio a fin a un Espanyol que no se encontró en Vigo.