Ambos equipos lograron una victoria, aunque muy distinta, en su último encuentro. El Atlético logró una victoria balsámica ante el Porto en el 98 gracias a un gol de Griezmann, mientras que el RC Celta logró una victoria cómoda gracias a una enorme gran segunda parte de los del Chacho Coudet ante el Cádiz.
Los celestes encaraban el encuentro con las bajas de Gonçalo Paciência y Óscar Rodríguez. Mientras, Jan Oblak, Stefan Savic y José María Giménez se perderían el partido para el Atlético de Madrid dejando la defensa en cuadro.
Inicio del partido
El árbitro pitó el inicio y el Atlético dejaba de lado la defensa de 5, con la que llevaba jugando las dos últimas temporadas, para que Witsel y Hermoso pasasen a jugar como los dos únicos centrales. Probablemente el Cholo se lamentó rápido de la decisión de poner a Hermoso en una defensa de 4, pues en el primer minuto mediría mal un bote y Larsen se quedaría mano a mano frente a un Grbić que se haría enorme.
No fue la única en la que el portero tuvo que intervenir, y es que en el minuto 3 Hugo Mallo remataría un córner solo en el área pequeña y el croata volvería a amargar al conjunto gallego. ¿Quién era Oblak?
Pero todos sabemos cómo funciona este juego, y quien perdona la paga. En el minuto 9 Lemar haría un gran cambio de orientación y tras un buen pase de De Paul, Correa demostraría que es el jugador más «cholista» que hay, da igual las circunstancias en las que juegue porque él va a rendir, no fallaría delante del portero. Un disparo del Atlético, un gol. ¿Para qué pedir más?
A continuación Mario Hermoso demostraría que aunque siempre acabe metiendo goles decisivos en los últimos minutos, atrás comete errores garrafales. Intenta filtrar un balón con el equipo abierto y esa mala entrega dejaría a Iago Aspas totalmente solo en el borde del área, y todo el mundo sabe qué significa dejar un centímetro a Aspas: peligro. El de Moaña golpearía al palo y el Atlético se libraría, otra vez, del gran inicio celeste.
Estas ocasiones harían ver a Simeone que debía volver a la defensa de 5 para compactar más al equipo, por lo que Reinildo se metió como central por la izquierda y Carrasco sería el encargado del carril
La primera parte acabaría con un mayor dominio celeste pero sin generar más ocasiones en la portería local. El Celta fue mejor pero la victoria era del Atlético.
Segunda parte
El Cholo vio que el Celta estaba consiguiendo transitar demasiado y decidió controlar más el partido metiendo a Koke en el descanso. Y este cambio, le saldría bien.
Los locales arrancaron mejor la segunda parte y esto se traduciría en el gol de Rodrigo de Paul en el minuto 50. Un disparo desde fuera del área del argentino tocaría en Unai Núñez, que desviaría el esférico y haría imposible la parada de Marchesín.
El partido bajaría de ritmo y el Cholo para rematarlo introduciría a João Félix y a Griezmann, otra vez en su cita con el minuto 63. Pero el que parecía terminar el partido sería Carrasco en el minuto 66, tras una buena jugada colectiva, encararía a su defensor y pegaría fuerte con la izquierda al primer palo. Un gol en el que Marchesín pudo hacer bastante más.
Pero de un error del portero se pasaría a otro, y es que cuando el partido parecía muerto, Grbic nos recordaría que aunque en la primera parte lo pareciese, no es Oblak. Un despeje de un córner le caería a Iago Aspas y filtraría a Gabri Veiga, que definió, a pesar de estar bastante escorado, al primer palo y el portero croata no evitaría que la pelota entrase. 3-1 y parecía que el partido volvía a nacer.
Pero Matheus Cunha se encargaría de matarlo en una galopada marca de la casa con el Celta muy arriba intentando forzar el 3-2. Una conducción en la que le haría un autopase a Unai Núñez, quedándose delante de Marchesín e intentando darle el pase a João Félix volvería a golpear en el defensa vasco y se convertiría en el 4-1. Doblete de Unai Núñez, pero en la portería equivocada.
Final del encuentro
El cuarto gol del Atlético acabaría de matar el partido y los rojiblancos vuelven a sumar los tres puntos contra un rival complicado y en un partido de menos a más.
El Celta también se llevaría noticias positivas pese a la derrota, pues jugó y compitió bien pero el Atlético estuvo más acertado en las áreas. Además, parece que lo de Gabri Veiga no es cosa de un día, sino que volvió a demostrar lo enorme futbolista que es y deja entrever que, antes o después, acabará siendo titular en el conjunto celeste.