Cuentas pendientes

Han pasado muchos años desde la última visita del Levante UD al Estadio Municipal Cartagonova. Fue en el año 2010, con ambos conjuntos jugándose el ascenso a la máxima categoría del fútbol nacional. El encuentro finalizó 3-5, y el protagonista absoluto fue un colegiado de aciago recuerdo en la ciudad trimilenaria: Teixeira Vitienes. El aficionado albinegro abandonó su butaca aquel día con la sensación de que un señor vestido de amarillo le había robado los sueños. Dos años después el Efesé descendió a Segunda B, categoría por la que deambuló 8 largos años en los que rozó la desaparición como entidad. Entretanto, el Levante disfrutó de la Primera División llegando, incluso, a codearse con los mejores en competición europea. El arbitraje de ese día cambió la historia reciente de ambos clubes.

Miguel de Cervantes abogaba por confiar en el tiempo, “que suele dar salida a muchas amargas dificultades”. Así lo hicieron en Cartagena, donde la herida de aquel día ya está cerrada. El club albinegro ha retomado el vuelo económica y deportivamente en los últimos años y mira al futuro con optimismo. Sin embargo, será imposible no acordarse de aquella tarde cuando los jugadores granotas vuelvan a pisar el césped de Benipila. Todo este contexto previo, sumado a la necesidad del Efesé de volver a sumar de tres en tres y la vuelta de los bombos al Cartagonova a buen seguro propiciarán un gran ambiente en el estadio. Es uno de los encuentros más esperados de la temporada por la parroquia albinegra.

Ganar o ganar

Tal y como ha indicado Luis Carrión esta semana en rueda de prensa, el FC Cartagena necesita ser valiente. Solo a través de la valentía en el juego puede cambiar una situación que, pese a que clasificatoriamente no parece tan grave (el equipo marcha noveno) sí lo es en cuanto a sensaciones. El equipo no vence desde su visita a Andorra a principios del mes de diciembre (siete jornadas atrás), y sus prestaciones en el campo han bajado considerablemente. Ha pasado en cuestión de semanas de ser un equipo que volaba sobre el terreno de juego y al que era casi imposible batirle a ser una plantilla agotada físicamente y desconfiado en su juego. Para acabar con esta mala racha el equipo ha hecho seis fichajes que darán aire fresco al equipo. Está por ver si Carrión mantendrá el esquema de la semana pasada en Ibiza, con defensa de cinco y Borja Valle de falso nueve, o volverá al 4-4-2. El técnico catalán cuenta con las dudas del recién llegado Darío Poveda y de David Ferreiro. El último en llegar en este mercado de invierno, Eteki, ya se encuentra disponible y podría incluso partir de titular.

El técnico incidió en la previa en que su equipo debe “perder el miedo a equivocarse (…) Me molesta que no intentemos cosas y hay que hacer filtrar pases complicados, encarar, golpear a puerta… Algunos días tuvimos el pie encogido y eso que está en la cabeza de los jugadores tenemos que cambiarlo”. En cuanto a su rival, Carrión opinó que es “de mucha calidad”, pero que como todos los equipos “también tiene sus puntos débiles”. El míster recupera a Jairo y a Musto para el duelo.

Con la mira en el ascenso directo

Pese al titubeante inicio de liga, la llegada de Javier Calleja al banquillo granota ha aupado al equipo a la zona noble de la tabla clasificatoria. El Levante es tercero, a tres puntos del Éibar, y ha demostrado en los últimos tiempos ser un equipo fiable. Suma 16 jornadas seguidas sin conocer la derrota, justo las que han transcurrido desde la destitución de Nafti. El Levante es, además, el segundo mejor visitante de la categoría de plata. Ha sumado 19 puntos lejos del Ciutat de Valencia. Asimismo, es el cuarto máximo goleador y el tercer equipo menos goleado de la liga.

Calleja no podrá contar con Iborra, sancionado, ni con Brugi y Mustafi, lesionados. Se cae de la lista Musonda. El míster ha dejado claro en rueda de prensa “que no se fía del Cartagena en absoluto”, y ha alabado al equipo dirigido por Luis Carrión. “Para mí es uno de los mejores equipos con balón, tienen mucho criterio, vamos a ver con qué sistema juegan, nos podemos esperar cualquier cosa”.

El equipo no estará solo en Cartagena. Medio millar de personas se desplazarán desde Valencia para apoyar a su equipo en su pelea por asaltar los puestos de ascenso directo.