El Lugo quiere, el Nàstic puede
El Lugo prolonga su sequía y se complica la vida ante un Nàstic que asalta el Anxo Carro y suma tres puntos que lo mantienen líder en solitario
Llegaba la jornada 6 al Anxo Carro donde ya empezaba a hacer frío para el CD Lugo que no ganaba desde la jornada inaugural en ese escenario. Los de Munitis necesitaban con urgencia un triunfo que respaldase el proyecto y que les evitase problemas. No iba a ser tarea fácil encontrar esa victoria ante la visita de un Nàstic que vive un gran momento y llegaba líder del Grupo I al feudo albivermello.
El líder hizo los deberes en el primer tiempo y aguantó, con ayuda del colegiado, el empuje local en el segundo para llevarse los tres puntos del Anxo Carro y mantener su liderato en solitario en el Grupo I. El Lugo no levanta cabeza y sigue sin ganar, algo que no hace desde la jornada 1. Un resultado que deja contra las cuerdas al míster Munitis.
Primeros minutos sin ocasiones y con los dos equipos tanteándose. El peligro llegaría al área lucense en el 9′ cuando Jaume Jardí tuvo una opción a balón parado con un lanzamiento de falta desde la frontal en el que buscó sorprender a un Tabuaço que realizó un gran estiramiento para enviara el esférico a córner. Iba, un poco centrada, pero directa a la escuadra.
El Lugo tocaba intentando salir de su campo y poner en apuros al líder pero el pase definitivo no acababa de llegar. Si encontró el camino en el 22′ cuando a punto estuvo César Morgado de abrir la lata de los goles. Primero centro de Javi Vázquez desde la derecha que remató Morgado forzado a las manos de Varo que blocó fácil. A renglón seguido, volvió a ganar en alto Morgado a la defensa del Nàstic, pero su remate salió desviado por poco. Ocasión clara.
Llegaba la pausa de hidratación en el Anxo Carro tras media hora de partido y lo cierto es que no pasaba gran cosa en el feudo albivermello. Partido táctico e igualado. La presión arriba de los de Dani Vidal estaba asfixiando a los gallegos que no encontraban el camino a la meta de Varo. Tampoco lo encontraban los tarraconenses que probaron con un centro de Marc Fernández al segundo palo que encontró a Andy que quiso ceder de cara a Jardí en lugar de rematar.
Cuando se consumía el primer tiempo, cuando más duele encajar, llegó el primer tanto del partido. Gran contra del líder que acabó con Andy enviando el balón al fondo de la red. Se adelantaba el Nastic en el Anxo Carro. El alicantino recogió el rechace del portero, después de un tiro de Marc Fernández para poner el 0-1. Con ese marcador se llegaría al descanso.
En el segundo acto pudo el Lugo poner el empate a los pocos minutos de comenzar tras un gran centro de Javi Vázquez. Solo en el área no consiguió dirigir a puerta Ledesma el centro desde la izquierda. Poco después, volvió a tener opción el conjunto albivermello pero sacó la defensa grana a saque de esquina. Salió con otra cara el conjunto de Pedro Munitis que quería sellar el empate cuanto antes. La muralla grana, que hasta la fecha solo había encajado un gol, aguantaba el empuje inicial de los gallegos que buscaban con insistencia el área rival.
A la hora de juego reclamaba la parroquia local penalti sobre Nacho Quintana cuando se internaba en el área desde la izquierda. El colegiado señaló falta, lo señaló fuera. De ser así, muy justito. Parecía penalti claro. La línea forma parte del área que delimita. Lo pone el reglamento. Indignación en la grada. El saque de la falta, un córner corto, fue directo y la defensa grana despejó a córner. El saque de esquina finalizó sin peligro. El esférico era del Lugo que estaba siendo mejor en el segundo acto pero sin fortuna de cara a gol.
Tras la pausa de hidratación mejoró el Nàstic que ya no vivía el mismo asedio por parte del Lugo. El cronómetro corría y el líder veía un nuevo triunfo cada vez más cerca. Con más corazón que cabeza lo intentaron los gallegos hasta el final pero sin tirar a puerta se complicaba el lograr un empate que no llegó.
El empate no llegó. El Lugo prolonga su sequía y se complica la vida ante un Nàstic que asalta el Anxo Carro y suma tres puntos que lo mantienen líder en solitario del Grupo I aumentando su renta con los perseguidores e imponiéndose al que, a priori, debería ser un rival directo por el ascenso.