La política de fichajes emprendida por el Real Madrid a lo largo de los últimos años ha cambiado radicalmente respecto a lo que solía ser un equipo acostumbrado a llevar a cabo prácticamente un fichaje galáctico por mercado. Ahora, el talento joven y los jugadores que terminan contrato son la prioridad del conjunto blanco.
Está claro que hay excepciones, como son los recientes casos de Tchouaméni o Bellingham, futbolistas jóvenes, pero por los que se ha tenido que llevar a cabo un gran desembolso. Sin embargo, en un equipo con vistas al futuro, parece lógico que el perfil buscado en La Casa Blanca sea un futbolista joven y con gran proyección. Y más allá de los nombres que ya se conocen, el Real Madrid se prepara para dar otro golpe sobre la mesa.
La pieza que falta para apuntalar el centro de la zaga merengue
Cada día que pasa, parecen más claros los fichajes de Kylian Mbappé y Alphonso Davies. Sin embargo, estas dos llegadas podrían no ser las únicas caras nuevas en la plantilla blanca de cara a la próxima temporada. Y es que el mercado francés, uno en el que el Madrid se ha movido como pez en el agua los últimos años, tiene un nuevo diamante en bruto: Leny Yoro.
Se trata del jovencísimo central de 18 años que milita en las filas del LOSC Lille francés, que ha captado la atención de algunos de los equipos más grandes de Europa, entre los cuales, por supuesto, se encuentra el Real Madrid. Un equipo que ve en el joven futbolista francés la opción perfecta para dar un toque de aire fresco a su zaga.
Y es que la edad de los centrales del Madrid hace pensar que un refuerzo a medio plazo se antoja imprescindible. Nacho, Alaba y Rüdiger, tres de las cuatro piezas clave del centro de la zaga merengue, tienen 34, 31 y 31 años respectivamente. Por ello, desde el club ya trabajan para encontrar la pareja perfecta para Militao en el mercado. Una posición con la que Leny Yoro encaja a la perfección para el cuerpo técnico blanco.
Una operación que, por otro lado, es muy factible. El joven central francés finaliza su contrato con el Lille el 30 de junio de 2025, y ya ha informado a la entidad gala de su intención de no renovar y probar una nueva aventura en el fútbol europeo, por lo que el próximo mercado de fichajes de verano sería la última oportunidad del Lille para sacar tajada por el que es uno de sus principales activos.
Una operación que, a nivel deportivo, puede recordar al fichaje de Raphael Varane, que aterrizó en Madrid como un niño y se marchó cuatro Champions League después de hacer una gran pareja junto a Sergio Ramos. Pero a nivel económico, de darse este mismo verano, recordaría a la reciente operación de Eduardo Camavinga, que aterrizó en la capital el último día de mercado ante la negativa del Stade Rennes a dejarlo salir gratis el año siguiente.
No obstante, no será una operación fácil. El otro gran contendiente por hacerse con sus servicios es el Paris Saint-Germain, que está dispuesto a llevar a cabo un gran desembolso para llevarse el gato al agua con el joven central. Sin embargo, fuentes cercanas al entorno del futbolista aseguran que el propio Yoro estaría encantado ante la idea de vestir de blanco. Y del mismo modo, el conjunto blanco estaría dispuesto a hacer un esfuerzo económico para llevarlo al Bernabéu este mismo verano, pudiendo llegar a una cantidad cercana a los 35 millones de euros.