El abismo de bajar a Segunda RFEF es muy obvio para el Rayo Majadahonda que visita a un Lugo que se acerca peligrosamente si no pone remedio a una dinámica que no solo lo ha llevado a ver imposible su objetivo de luchar por el ascenso sino que deja el equipo muy comprometido para los últimos envites del curso.
Lugo: no mirar abajo
La derrota ante el Barça Atlètic del Lugo fue demasiado castigo para un club que sigue cuesta abajo y sin frenos. Los albivermellos cosecharon su cuarta derrota consecutiva, quizá sin merecerlo porque hizo un buen trabajo para tapar los caminos al Barcelona B, pero la mala suerte se cebó a través de Andrés Castrín que hizo gol en propia puerta. Esta derrota se suma a las cosechadas ante Cultural, Tarazona y Celta Fotuna. Al acabar el partido decía ante el Celta Fortuna el míster Roberto Trashorras que «mirar para arriba ya no es posible y ahora hay que sumar para alejarnos de abajo». Y así es. Un equipo que estaba llamado a estar arriba ha vivido una temporada cuanto menos decepcionante y acaba el curso sin opciones de Playoff, ya a 17 puntos, y mirando, de momento, por el retrovisor a una parte baja que acecha a solo 3 puntos. El conjunto albivermello debe reaccionar si no quiere acabar el curso metido en la lucha por la permanencia. Buscará esa reacción en casa donde su balance este curso ha sido hasta la fecha de 5 victorias, 5 empates y 6 derrrotas.
Rayo Majadahonda: ganar o ganar
Consciente de su situación salió el Rayo Majadahonda con todo a su partido de la pasada semana en el Cerro del Espino ante el Tarazona pero las ganas se quedaron en eso al no pasar del empate a cero con los aragoneses. Un resultado que poco cambia su situación que parece avocada al descenso. Tras el resultado del sábado, el Rayo Majadahonda se coloca momentáneamente a 12 puntos de la permanencia al ser colista con 25 puntos. Dicho esto, aunque las matemáticas aún no lo dicen, el Rayo Majadahonda tiene más un pie en Segunda Federación que en la categoría de bronce en la que ahora milita. Y es quedan 15 puntos en juego por lo que tendría que tener un balance prácticamente perfecto en los 5 partidos que le quedan (3 como visitante y 2 como local) y depender del resto de equipos. Ese primer triunfo de esperanza lo buscarán los majariegos a domicilio donde su balance en lo que va de curso ha sido de 2 victorias, 5 empates y 9 derrotas.
Las bajas
En el Lugo se pierden el partido por sanción Andrés Castrín y Carlos Julio. Por el mismo motivo no estará en el Rayo Abajas.