El Pontevedra se agarra a su fortaleza como local en el Municipal de Pasarón para sumar un nuevo triunfo en casa que le acerque al liderato, ahora a 3 puntos. Lo buscará ante un Marino de Luanco que, tras tres jornadas quiere recuperar sensaciones y volver al triunfo para no caer en la tabla.
Pontevedra: no fallar en el fortín
Seis meses después, el Pontevedra Club de Fútbol ha vuelto a ganar lejos de su feudo. Lo logró en Asturias, donde superó al Langreo por 0-2 en un partido en el que apenas sufrió en defensa y en el que supo aprovechar las pocas ocasiones que tuvo para sentenciar. El Pontevedra parte una temporada más con cartel de candidato y, una temporada más, está mostrando el talismán que es Pasarón. Hasta el momento cuenta sus partidos en casa por victorias. Se impuso al Valladolid Promesas en la primera fecha y en su último duelo como local tiró de épica para remontar y llevarse la victoria ante el Deportivo Fabril con un gol de Álex González en el último minuto. Ahora, tras las dos últimas victorias, el cuadro granate es cuarto con 10 puntos, los mismos que el Ávila y real Avilés, tercero y segundo respectivamente, y 3 puntos por encima tienen al líder Numancia.
Marino: volver al triunfo
El Marino de Luanco siempre ha sido un equipo peleón y que en las últimas temporadas ha demostrado que no es casualidad que esté donde está salvándose sin apuros. Esta temporada empezó el curso en buena forma con dos triunfos consecutivos y ocupando gracias a ello un puesto en la zona noble. Como decíamos, el curso comenzaba con dos triunfos, seguidos de la única mancha en su expediente hasta el pasado domingo y un empate ante el Real Valladolid Promesas en los Anexos. El pasado fin de semana vivió su tercera semana sin vencer cosechando una dolorosa derrota en casa. El Compos se impuso en Miramar 0-2 dejando a los de Manel Menéndez con 7 puntos en el casillero en el puesto 8 de la tabla. Por arriba el Playoff está a solo 1 puntos y el descenso queda a 2 puntos.
Las bajas
En el Pontevedra no estarán por lesión Héctor Hernández y Javi Fontán.