Miramar un domingo a las cinco de la tarde. Una cita habitual cuando se trata del Marino de Luanco oficiando como local en Segunda RFEF. Los gozoniegos buscarán su primera victoria de 2025 tras arrancarlo de una forma para olvidar en Laredo. Frente a ellos todo un rival directo como es la Gimnástica de Torrelavega. Porque aunque les separen once puntos, ambos conjuntos buscan lo mismo: la salvación.
Los del Nuevo Malecón también estrenaron 2025 con un partido del que prefieren no acordarse. En su caso fue una derrota por la mínima en casa frente al Langreo, pero que les ha frenado en seco de cara a iniciar el año con aires de remontada. Están a ocho y nueve puntos del play-out y permanencia respectivamente y todo lo que no sea ganar será clavar una punta en el ataúd con dirección a Tercera RFEF.
A día de hoy, el Marino estaría salvado, pero tal y como está el grupo eso puede cambiar rápidamente. El descenso, que hace dos meses parecía muy decidido, se ha abierto con la remontada del Guijuelo. La Gimnástica quiere que se abra un poquito más y no sea una plaza (sin contar la de promoción de descenso) que los equipos quieran evitar, sino más. Por ello, el primer duelo que acogerá el césped de Miramar en 2025 se antoja clave para el corto plazo de ambos equipos.
Un partido que el Marino afrontará con bajas por diversos motivos. Por lesión se espera que Lora, que sufrió una recaída antes del partido de la semana pasada en Laredo, siga siendo baja. Tampoco estarán disponibles por sanción el capitán Guaya y el extremo César García. Esto motivará cambios en el once de Manel Menéndez para intentar pasar página del mal encuentro en San Lorenzo, donde el técnico declaró que su equipo había hecho ‘el peor partido de un equipo suyo desde que es entrenador’.
También los habrá en el de Jaime Álvarez. El técnico asturiano del cuadro torrelaveguense recupera tras cumplir sanción a Gándara y Parga, presumiéndose que ambos sean titulares. Pero pierde a Diego Campo en el centro del campo, motivo por el que Arredondo, fichaje invernal, podría hacer su debut como titular en el centro del campo junto a Alberto Gómez. Éste ya le dio el curso pasado con un golazo la victoria a los cántabros en Miramar.
El encuentro lo dirigirá el colegiado eibarrés, adjunto al comité guipuzcoano y por ende, vasco, de 26 años, Jorge Rubio Ortega. Debutante en la categoría, el de este domingo en Miramar será el octavo partido que arbitrará en la categoría. En los siete anteriores, su balance fue de cuatro victorias locales y tres visitantes, sin empates. Mas en ninguno de ellos dirigió a los conjuntos gozoniego ni cántabro.