El Barça se ha ganado con un inicio de año casi perfecto el privilegio de ser el único de los implicados en la lucha por el título que depende única y exclusivamente de sí mismo para alzarse con el título de campeón de Liga en menos de dos meses, pero ¿qué debe hacer el FC Barcelona para llegar campeón a El Clásico del 11 de mayo?
Como decimos el Barça ha vivido en los últimos meses una remontada espectacular. El equipo de Flick, pese al empate contra el Betis (1-1), sigue aumentando su ventaja respecto al club blanco. En los últimos diez partidos de LaLiga acumula 28 puntos por sólo 17 del Real Madrid.
Y es que en la jornada 20, el equipo madridista lideraba la tabla con 46 puntos, dos más que el segundo, el Atlético, y siete más que el Barcelona. Diez jornadas después, y más de 20 partidos invicto, el conjunto azulgrana es líder en solitario con 67 puntos, a cuatro del inmediato perseguidor, el Real Madrid.
Flick ha visto cómo se truncaba su racha de victorias seguidas en LaLiga, quedándose al final en nueve, aunque continúa con la de partidos invicto, llegando ya a los 22, y acercándose al récord de Frank Rijkaard, con 24 en la temporada 2005/06.
Volver al triunfo en su próxima cita de Liga es importante para llegar al partido del 11 de mayo con los deberes hechos. El Barça tiene 4 partidos por delante antes de medirse al eterno rival y debe conseguir una renta con los blancos de 13 puntos para poder ser campeón ya que una vez llegados a esa fecha quedarán 12 puntos por disputarse.
Es una tarea casi imposible y además no depende solo del gran rendimiento desplegado por el conjunto de Hansi Flick. Los culés tendrían que ganar esos cuatro duelos y esperar una debacle en las filas del equipo blanco. De ganar todo, el Barça llegaría a la jornada 35 con un acumulado de 79 puntos.
Para ser campeón antes de la disputa de este partido, debería, como decíamos, aventajar en 13 puntos al Real Madrid, es decir ahora el conjunto blanco suma 63 puntos y solo podría sumar 3 puntos en los próximos cuatro partidos, algo que ahora mismo y a pesar del mal momento de los de Ancelotti, parece un imposible.