El Barça avanza hacia el tramo decisivo de la temporada con paso firme y con unos números al alcance de muy pocos. El objetivo es el triplete y hay confianza en lograr esa meta siendo el equipo más goleador de las principales ligas. El trabajo sobre el terreno de juego parece encaminado, y fuera del verde Deco ya trabaja con la mira puesta en el mercado de fichajes para el que tiene claros varios objetivos primordiales para reforzar una plantilla que este curso ya está rindiendo a un gran nivel.
El problema del fair-play
Se trabaja en un mercado incierto ya que una cosa es lo que hace falta y otra lo que dejará de margen el ‘fair play’. El club tiene que afrontar alguna renovación más de peso como las de Lamine Yamal, Koundé y De Jong y, por tanto, debe dedicarles espacio salarial.
Además, LaLiga ha puesto en duda una de las dos operaciones del Barça por los asientos VIP (la realizada con New Era Visionary Group, de Emiratos Árabes Unidos) en sus alegaciones enviadas al CSD por la inscripción de Dani Olmo y Pau Víctor. Además, el club no regresará al Camp Nou en los plazos previstos inicialmente, por lo que esos ingresos estipulados para su vuelta al remodelado Spotify Camp Nou no se cumplirán.
«El club confía en poder maniobrar en el mercado la regla 1:1 este verano porque los asientos VIP estarán construidos antes del 30 de junio, pero independientemente de que lo acabe logrando o no, no se contempla ninguna inversión importante en el corto plazo», explica Sport.
La necesidad de un extremo izquierdo
En el conjunto azulgrana hay dos claras prioridades, aunque no se descartan más. La primera de ellas, consensuada entre Deco y el entrenador alemán, es la de fichar a un extremo zurdo que ya intentaron el pasado verano. El de extremo es un deseo que ya lleva en la lista desde el pasado mercado veraniego y que, con varios candidatos en el horizonte, esperan sellar en los próximos meses.
Aunque antes de que haya nombres, o vuelva a aparecer el de Nico Williams que fue el gran deseo de 2024, ya se habla de un precio en torno a los 60-70 M€. En el Barça hace falta un futbolista que sea más capaz de abrir el campo y desbordar por habilidad en el uno contra uno y por velocidad y potencia pero en estático.
Rafael Leao se pone cuesta arriba
Uno de los objetivos del Barça para ese puesto de extremo es Rafael Leao. El problema para los culés es el dinero, ya que la operación podría dispararse hasta los 75-80 M€, cantidad inasumible para la entidad catalana, pero no para un Nápoles que, pese a partir en una cierta desventaja respecto a los clubes ingleses, está dispuesto a apurar sus opciones.
«Leao lleva unas semanas sonando como heredero de Kvara. Lo ficharía de inmediato, pero es muy difícil. Mendes quiere llevárselo del Milán; el destino más probable es la Premier League. El Barcelona carece de liquidez, que el Nápoles sí tendría. Mendes pretende hacer un estudio exploratorio con los azzurri. La valoración del jugador ronda los 75-80 millones de euros; el problema no es el precio, sino el salario. Deberían darle a Leao no menos de 8 millones de euros; en la plantilla azzurri, el mejor pagado es Lukaku, y será difícil superar esos parámetros», explicó con detalle Emanuele Cammaroto, experto en el mercado, al ser consultado por Radio Punto Zero.