El Barça-Osasuna de esta temporada tuvo que ser aplazado por la triste muerte del doctor Carles Miñarro pocas horas antes de la celebración inicial del mismo. Tras el aplazamiento, la primera de las polémicas llegó con la elección de la fecha del encuentro ya que se fijó justo después del parón de selecciones y los azulgrana se quejaban de cansancio y falta de efectivos para la disputa del mismo.
La segunda de las polémicas llegó tras el encuentro. Osasuna tomó la decisión de impugnar el partido contra el Barça por alineación indebida. El club navarro pedía información a la RFEF porque consideraba que Iñigo Martínez no podía jugar tras ser desconvocado por España por culpa de una lesión. El central sufrió una parameniscitis interna en la rodilla diestra, motivo por el cual no pudo acudir con la selección española tras ser convocado por Luis de la Fuente durante el parón internacional.
Por este motivo, Osasuna creía que el Barça podría haber incumplido una norma FIFA sobre el tiempo que tiene que transcurrir tras una baja por lesión con la Selección, un periodo de cinco días posteriores al último partido de la ventana internacional, que tuvo lugar solo 4 días antes de la celebración del duelo de Liga.
Ahora, en los próximos días, Osasuna decidirá si acude a la última instancia deportiva española, el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). La entidad rojilla dispone de 15 días hábiles como plazo desde que el pasado 8 de mayo el Comité de Apelación de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) desestimó el recurso presentado por el conjunto navarro.
En caso de que este recurso tuviese recorrido, implicaría tres puntos vitales para Osasuna en la lucha por Europa y dejaría el título de Liga en el aire al perder los azulgrana 3 puntos. Sin embargo, los expertos indican que LaLiga está a salvo por varios motivos.
En concreto, según Miguel Galán, presidente del Centro Nacional de Formación de Entrenadores (CENAFE) y experto en derecho deportivo, la posibilidad de que el Barça pierda la liga es del 0% ya que el recurso de Osasuna no tiene recorrido y, además, en caso de que lo tuviese, la sanción sería siempre una multa económica y no la pérdida de puntos.
Galán apunta que «de estimarse las pretensiones de Osasuna nunca sería alineación indebida y pérdida de puntos, sino que siempre sería una multa económica. Y en segundo lugar, porque ninguno de estos órganos es competente para resolver cuestiones del reglamento de la FIFA», sentenció.