Joan García es desde hace unos días jugador del FC Barcelona y como tal ha concedido su primera entrevista a los medios del club donde ha dejado claro que no fue una decisión difícil, pero era el siguiente paso a dar. Además, sobre toda la polémica con su llegada y el papel de Ter Stegen ha hecho una declaración de intenciones de que viene para jugar y que «el marrón» lo tendrá Hansi Flick a la hora de tomar decisiones.
Un Joan García con las ideas muy claras
Durante su entrevista el jugador ha dejado claro que es consciente de donde recala, el nivel de exigencia y la competencia que debe haber por ganarse el puesto. «Cuando estás en un equipo de este nivel tiene que haber competencia, es muy sano que la haya, debe haberla. En la exigencia del día a día nos hace mejores a a todos. Entre los porteros hay una conexión especial que igual no hay en otras posiciones», reflexionó. «El marrón lo tiene el míster», añadió entre risas.
Y es que su fichaje por el FC Barcelona ha estado cargado de polémica y ha tenido un principal damnificado. La idea del conjunto azulgrana es que renovar a Szczesny y que este sea el que forme binomio con Joan García. En esa ecuación no hay hueco para el capitán Marc-André Ter Stegen del que se duda de como regresará de una lesión tan grave a sus 33 años y al que se le busca una salida que no apunta a ser fácil. Las pretensiones económicas del jugador, con contrato hasta 2028, así como su reticencia a salir complicarían la operación.
Ambición total
Joan García sabe que el cambio en su rutina y forma de trabajar será radical, pero lo asume con ganas y ambición por ganar títulos. «El nuevo estilo es muy diferente al que estoy acostumbrado, pero estoy muy convencido de que podré adaptarme», afirmó. «Sólo pienso en el primer día en la Ciutat Esportiva, cuando me ponga las botas y me vaya a entrenar. Espero que sean muchos años de muchos títulos y éxitos», recalcó.
Una decisión difícil
No ha ocultado en la entrevista que salir del Espanyol para recalar en el FC Barcelona no fue una decisión fácil. «Evidentemente, por donde vengo, ha sido complicado. Tenía sentimientos un poco raros», admitió y añadió que para él lo primero siempre fue dejar al ESpanyol en Primera «hasta que no acabáramos la temporada en la que estuvimos luchando por lograr el objetivo hasta el último día». Luego, llegaron «días y semanas intensos». Y decidió ir al Barça. «Lo he consultado mucho conmigo mismo, con mi gente, con la familia. Estaba bastante convencido de que era el paso a hacer y estoy contento de haberlo dado», argumentó.
No puede ocultar el jugador que la decisión ha sido la correcta y que confía una adaptación rápida. «Estoy superconvencido y muy contento. Es un equipo ‘super’ joven y eso ayudará a a mi adaptación, a que entre de la mejor manera». «Ahora mismo es uno de los mejores proyectos que hay en el mundo del fútbol y, además, estoy en mi casa. Tenía muchas ganas de unirme a un proyecto así y qué mejor que en mi casa», subrayó.