La vuelta al Spotify Camp Nou está en peligro. En un principio estaba programado que el Barça volviese a casa para la disputa del Trofeo Joan Gamper el próximo 10 de agosto, una semana antes del estreno en LaLiga. Sin embargo, salvo milagro de última hora, el club no tendrá los permisos para la apertura del estadio por lo que no le quedará más remedio al club que cancelar el partido. En cuanto a la competición doméstica, el club pidió comenzar como visitante por lo que no volverá a su feudo hasta el mes de septiembre donde se espera no haya ya ningún problema.
El Gamper, un problema tras otro
Desde que el Barça anunció oficialmente que volvía al Camp Nou durante la celebración del Trofeo Joan Gamper el próximo 10 de agosto de 2025, todo han sido problemas. Y es que las obras del estadio azulgrana, tras dos años de obras, están aún sin terminar. Queda aún pendiente la construcción de la nueva tercera grada, el doble anillo VIP, la instalación de la cubierta, así como la adecuación final de algunos espacios interiores y la urbanización exterior del entorno del Estadio.
Por este motivo, tanto la vuelta al Trofeo como a LaLiga se hará a medio gas. Sin aforo completo y medidas especiales. De hecho, se espera que para la vuelta de la competición doméstica el aforo sea de unos 60 mil aficionados, algo que en un principio también se quería para el Gamper, pero que no tardó en descartarse y reducirse a 35 mil espectadores finalmente.
Este no fue el único problema que afrontó el torneo y es que ya hace semanas desde el Ayuntamiento se apuntó que no tenían tan claro que pudiese abrirse el estadio a la afición para el Joan Gamper. «Hoy no estamos en este momento y necesitamos el tiempo para poder comprobar una vez acabadas las obras que el estadio está en condiciones para poder acoger público», comentó la teniente de alcalde.
Sin permisos de apertura
Un problema que va a hacer que el Barça tenga que cancelar el Gamper en el Camp Nou. Desde el club se trabaja 24 horas al día para avanzar la obra y llegar a tiempo, pero ahora mismo todo apunta en dirección a la cancelación. Por un lado el conjunto azulgrana tuvo la buena noticia de recibir la licencia de actividad, sin embargo, falta por recibir el de ocupación y no se cree que vaya a llegar a tiempo para alojar en el feudo azulgrana a 30 mil personas.
Aún no se ha tirado la toalla, pero se es pesimista de que las últimos papeles lleguen a tiempo. Si el partido no pudiera disputarse en el Camp Nou, apunta a trasladarse al Johan Cruyff de la Ciudad Deportiva. Tras dos años jugando en Montjuic el regreso al Camp Nou era algo muy esperado y un nuevo retraso supone un fracaso para el conjunto azulgrana.