Llegaba uno de los días que está marcado en rojo en el calendario de cualquier futbolero: se entregaba el Balón de Oro. La flor y nata del deporte rey, aunque con la notable ausencia del Real Madrid por segundo año consecutivo, desfilaba por la alfombra roja para reunirse en el Theatre du Chatelet parisino y ver quién era proclamado mejor futbolista de la pasada temporada. La lucha estaba entre Ousmane Dembélé y Lamine Yamal y finalmente ha sido El Mosquito el que ha conseguido llevarse ese prestigioso galardón que entrega France Football y que todo jugador espera ganar alguna vez en su carrera. Eso sí, el de Rocafonda volvió a repetir con el Trofeo Kopa.
Horas antes de que arrancara el evento en la capital francesa la revista gala fue publicando el ranking de cómo habían ido quedando los nominados hasta llegar al top 10. Uno de los primeros nombres en aparecer fue el de Erling Haaland, que acabó en la vigesimosexta posición de este Balón de Oro 2025. El español Fabián Ruiz tuvo que conformarse con acabar dos posiciones por delante del noruego, en la vigesimotercera plaza, uno de los futbolistas del Real Madrid: Jude Bellingham.
A medida que nos íbamos acercando a la gala conocíamos más posiciones. Robert Lewandowski terminó decimoséptimo e inmediatamente por delante estaba al que muchos consideraban el ganador del Balón de Oro del año pasado: Vinicius Júnior. Pero, sin duda, lo que también llamó, y mucho, la atención fue ver a Pedri González fuera del top 10. Tras el recuento de votos, el de Tegueste terminó en la undécima posición del ranking.
Lamine Yamal repite en el Kopa
A lo largo del evento organizado por France Football se entregaron otros premios. El PSG fue premiado como el mejor club de la pasada temporada en el fútbol masculino, mientras que el de femenino se lo llevó el AArsenal. Viktor Gyokeres sabía que recibiría el Trofeo Gerd Müller y el atacante del Arsenal allí estuvo para recoger su trofeo, al igual que Ewa Pajor, que se llevó el galardón femenino. En cuanto a los entrenadores, el Johan Cruyff fue a parar a las manos de Sarina Wiegman y Luis Enrique.
Por otro lado, volviendo a los futbolistas, a los verdaderos protagonistas de este deporte, el Trofeo Yashin que premia al mejor guardameta, fue a parar a los guantes de Donnarumma y Hampton. El otro premio que genera gran ilusión es el Trofeo Kopa, con el que se reconoce al menor de 21 años que más ha destacado en el último curso. Lamine Yamal y su compañera de club en el Barcelona Vicky López se llevaron esa copa a su casa, dejando claro que en el futuro esperan poder aspirar al Balón de Oro que acabó entregándose un rato después. En este premio, que se empezó a dar en 2018, nadie había conseguido ganarlo dos veces y el de Rocafonda ha hecho historia al ser el primero en lograrlo.
Dembélé es el Balón de Oro
El momento más esperado llegó al término del evento. Dos cracks como Andrés Iniesta y Ronaldinho tenían que subir al escenario porque fueron los responsables de entregar el Balón de Oro femenino y el masculino. El manchego, que le dio aquella estrella a la selección española, fue el encargado de darle el galardón a Aitana Bonmatí, mientras que el astro brasileño, instantes después, puso el colofón final dándole esa pelota brillante a Ousmane Dembélé.
Y es que minutos antes de que se desvelase el nombre de Ousmane Dembélé, el francés ahí estaba junto a Lamine Yamal en las butacas del Theatro du Chatelet. El planeta entero, pendiente de cuál de los dos nombres iba a salir de la boca de Ronaldinho. Las dudas, los debates y las semanas de espera llegaban a su fin. El Balón de Oro 2025 caía en las manos del extremo del PSG, que, al estar lesionado, pudo subir ese a recibir ese galardón que en el pasado había visto ganarlo a su ex compañero en el Barcelona Leo Messi, pero ahora le tocaba a él. Era su momento y El Mosquito será durante el próximo año el mejor futbolista del mundo y ya nadie lo podrá cuestionar.