Con los dos precedentes de la década de los 50, favorables uno a cada equipo, la final se reeditaba en 1971. Valencia CF y FC Barcelona se enfrentaban de nuevo. Otra final del Copa del Rey (Generalísimo por aquel entonces), otra vez en el Bernabéu. El Valencia venía lanzado tras su título liguero y los catalanes no querían dejar pasar la oportunidad de llevarse un título a sus vitrinas.
Una final polémica
Como sucede en tantas ocasiones en el fútbol, la polémica estuvo muy presente en este partido y del lado valencianista fueron constantes las quejas por la parcialidad arbitral de Saiz Elizondo, con especial énfasis en el tercer gol blaugrana tras una flagrante falta cometida sobre el Zamora de la Liga, Abelardo, y en una clara posición de fuera de juego.
El partido tuvo de todo, emoción, polémica, goles, expulsiones, un campo lleno a rebosar y mucho y buen fútbol por ambas partes.
Una primera parte valencianista
Si bien el Valencia fue claro dominador en la primera parte, su exigua renta de 1-0, tanto anotado en un penalty tan claro como protestado por los azulgrana, le obligaba a no bajar la guardia. Y así fue en la segunda parte. Los ataques valencianistas fueron constantes en busca del segundo gol, segundo gol que llegaría a la salida de un córner lanzado por Sergio y rematado imperialmente por Paquito, que se elevó sobre toda la defensa barcelonista para hacer estallar de júbilo a todos los valencianistas allí congregados. El Bernabéu pareció Mestalla por un momento, con más de 30.000 gargantas alentando a los suyos en busca del doblete.
El Barça iguala fuerzas
Fue entonces cuando surgió el mejor fútbol del Barça y la figura del colegiado. El primero consiguió arrinconar a los valencianistas en su área, replegados en busca del contrataque que sentenciara la final. El segundo consiguió desquiciar a los jugadores «xe» tras la polémica acción del empate. Gol anulado y posteriormente concedido que acabó con la expulsión de Sol. El Valencia llegaba mermado y sin uno de sus bastiones defensivos a la prórroga.
Una prórroga vertiginosa
Fue un tiempo extra donde nadie se guardó nada, donde los dos equipos se batieron el cobre con coraje y pundonor, de manera especial el Valencia, que llegaba muy tocado física y moralmente tras la polémica acontecida con anterioridad. Empezó adelantándose el FC Barcelona con lo que parecía una final sentenciada ante un rival en inferioridad, pero no se arrugó el equipo de la capital del Turia y consiguió empatar. Óscar Rubén Váldez sería el artífice del gol que mantuvo la ilusión en la afición, ilusión que desapareció en el 113 con el gol de Alfonseda. Los de Di Stefano, abatidos y desfondados, lo intentaron, pero con más corazón que cabeza y con poco fútbol en sus botas.
Foto destacada: informavalencia.com
Fuentes bibliográficas: Ciberche.net, Historia del Valencia CF, (Marca) informavalencia.com, Gran historia del Valencia CF (Levante EMV)
@VicentSarrion