El Real Madrid confirma que jugará la final de Copa del Rey: «Deben prevalecer los valores del fútbol». En medio de toda la polémica con el plantón de los blancos en el entrenamiento, rueda de prensa y cena oficial, muchos eran los que hablaban de una no comparecencia en el partido de esta noche, pero desde el Madrid se ha confirmado que esa opción nunca ha estado sobre la mesa.
Tras las palabras y ardua defensa de los colegiados De Burgos y González Fuertes en la tarde de este viernes previo al encuentro de la final de Copa del Rey, el Real Madrid se ha tomado sus palabras como un ataque directo contra el club y han pedido modificar a los dos árbitros para el partido de mañana sábado ante el FC Barcelona.
Ante la negativa de la Federación a proceder al cambio de colegiados, el Real Madrid decidió dar plantón a todos los actos previstos para el viernes tarde lo que hizo saltar la alarma sobre la disputa del partido este sábado a las 22 horas en La Cartuja. Sin embargo, la entidad blanca no dudó en emitir un comunicado aclarando la situación.
El comunicado íntegro del Madrid
«Ante los rumores que han surgido en las últimas horas, el Real Madrid comunica que nuestro equipo nunca se ha planteado renunciar a jugar la final de mañana.
Nuestro club entiende que las desafortunadas e inapropiadas declaraciones de los árbitros designados para este partido, efectuadas 24 horas antes de la final, no pueden manchar un acontecimiento deportivo de trascendencia mundial que verán cientos de millones de personas y por respeto también a todos los aficionados que tienen previsto su desplazamiento a Sevilla, y a todos aquellos que ya están en la capital andaluza.
El Real Madrid entiende que deben prevalecer los valores del fútbol, a pesar de la hostilidad y la animadversión que hoy han quedado de manifiesto, una vez más contra nuestro club, por parte de estos árbitros designados para la final».
La indignación continúa
A pesar del comunicado y de presentarse al encuentro, el Real Madrid simplemente hace prevalecer el fútbol y pospone su guerra con el arbitraje porque la indignación sigue presente. En las conversaciones que se han producido a lo largo de toda la tarde del viernes entre el Madrid y la Federación, el club ha recalcado una y otra vez que los árbitros encargados de dirigir la final han mostrado una una clara y manifiesta animadversión y hostilidad contra el Real Madrid, algo que preocupa, y mucho, de cara al duelo.
El Real Madrid saltará al terreno de juego y habrá que ver qué sucede más allá del resultado ya que habrá un claro foco puesto en De Burgos Bengoetxea y González Fuertes.