El Real Madrid sufre más de la cuenta para seguir en Copa
Mayoral salió al rescate de un Real Madrid que sufrió más de la cuenta para superar al Fuenlabrada.
Lo que parecía ser un partido de trámite para los pupilos de Zidane finalmente se fue envenenando hasta acabar en un definitivo 2-2. Mayoral se erigió como el verdadero hombre el encuentro.
Si por algo se caracteriza la Copa del Rey es por la ilusión que transmiten los equipos más pequeños. Un David vs Goliat siempre es indicio de posible sorpresa y en el Santiago Bernabéu no iba a ser distinto. Un Fuenlabrada de lo más valiente salió al templo blanco sin ningún temor porque, evidentemente, esta no era su liga. Ahora bien, el primer gol del jovencísimo Luis Millá reabrió una ilusión que por momentos se disparaba hasta síntomas inimaginables. El misil teledirigido del centrocampista acabó rebotando en Keylor Navas para deseo de un Antonio Calderón que no paraba de transmitir indicaciones a sus jugadores en un simulacro fallido de ‘alcorconazo’.
‘Guardería blanca’
El club blanco hizo su puesta en escena hasta con siete canteranos partiendo desde el XI inicial. La ‘guardería blanca’ estuvo capitaneada por el argentino Fran Feuillassier, quien no paró de intentarlo una y otra vez por el perfil diestro. Por su parte los Achraf, Tejero, Óscar y compañía ni mucho menos tuvieron su mejor día.
Por utópico que parezca dio la sensación de que ambos conjuntos se habían cambiado los papeles y lo cierto es que el guion fue rocambolesco. Finalmente fue Borja Mayoral quien marcó la diferencia de la mano de un doblete que le sirve para reivindicarse una vez más. Tal y como en Anoeta, el ‘21’ volvió a ser decisivo en un envite de lo más competido.
Regreso triunfal de Bale
Después de estar dos meses fuera de los terrenos de juego, el galés por fin retornó al Santiago Bernabéu. Un estadio que ejerció el rol de juez de manera igualitaria donde silbidos y aplausos fueron la sinfonía dominante. La gran asistencia a Mayoral en el primer tanto madridista fue crucial para que el Madrid pudiera salir ileso del encuentro. Sin embargo, las sensaciones merengues dejaron mucho que desear durante el transcurso de los minutos. El tanto anotado por Portilla volvió a dejar un sabor agridulce en la parroquia blanca. Lo cierto es que el Real Madrid no dejó buena imagen en conjunto, pero actuaciones como la de Mayoral y Bale sirven como aliciente para aferrarse a los próximos envites ligueros.
