El Athletic de Bilbao se ha impuesto por dos tantos a Osasuna en un partido donde los rojiblancos fueron superiores en el cómputo global del partido. La primera parte comenzó con un Nico Williams eléctrico siendo el futbolista más desequilibrante del partido.
No obstante, las lesiones empezaron a sucederse en los locales. Primero Raul García tenia que abandonar y posteriormente el propio Nico Williams tenía que retirarse minutos antes de acabar la primera mitad.
Justo antes de eso, los leones iban a adelantarse en el luminoso. Centro desde la banda derecha y el recién ingresado Alex Berenguer enviaba un cabezazo inapelable al fondo de las mallas para poner el delirio en San Mamés.
La segunda parte bajo el talón con un Osasuna mucho más volcado en ataque que en los primeros cuarenta y cinco minutos. Kike García se ofrecía y Barja también lo intentaba con alguna pelota al corazón del área.
Cuando parecía que el partido moría con el 1-0, Villalibre ponía el segundo en el feudo rojiblanco tras un pase espectacular de Iñaki Williams al segundo palo. El canterano empujaba la pelota a la red y la tranquilidad llegaba a Bilbao.
Con este resultado, el equipo de Marcelino se la jugará todo a una carta en la última jornada contra un Sevilla que no se juega nada prácticamente. La derrota del Villarreal ante la Real deja un hilo de esperanza para el Athletic en el Pizjuan que necesita empatar o ganar ante el club hispalense si el Villarreal cae en el Camp Nou.
