En el mundo del fútbol, y sobre todo para los equipos modestos, se ha hablado siempre de ser fuerte en tu casa. En el caso del Racing de Santander, El Sardinero es un fortín en el 2023 coincidiedo con la llegada de José Alberto donde solo ha perdido un partido. En cambio, todo eso contrarresta la mala racha a domicilio. Y es que lejos de Santander solo ganó un partido en todo el año y este inicio liguero sigue la senda de lo que fue el curso pasado. Solo 2 puntos en las 5 primeras salidas.
Campos difíciles y muy seguidos
El Racing comenzaba la semana de triple compromiso con dos salidas muy duras y complicadas. Tanto en lo deportivo como en lo logísico, ya que desde el pasado jueves hasta este mismo miércoles, el equipo de José Alberto ha estado lejos de tierras cántabras. Con 12 puntos y en zona de playoff, visitaba Butarque para medirse ante uno de los equipo más en forma, el Leganés. 4 días después, viajó a las islas desde la capital de España para enfrentarse al Tenerife, otro de los equipos al alza en esta categoría.
Dos salidas, un mismo planteamiento y dos derrotas claras. El Racing no solo fue superado por Leganés y Tenerife, sino que hubo tramos de partido donde no le dio para competir y cometió errores impropios. En resumen, se vio una cara totalmente opuesta a los partidos en El Sardinero, donde ha sumado 10 de 12. Es cierto que estos dos desplzamientos, al igual que Espanyol, Elche y Zaragoza, eran de las más difíciles de la temporada, pero se esperaba una imagen no tan antagónica a lo que se ha visto.
El planteamiento de José Alberto
Con dos equipos diferentes, ya que de Leganés a Tenerife, el técnico verdiblanco realiza 8 cambios, pero el planteamiento fue igual en los dos partidos. Buscaba ser conservador en la primera parte y buscar con los cambios empezar a ganar presencia y tener opciones de ganar. Sin embargo, en ninguno de los salió como estaba planeado. «Fuera de casa no nos está dando para acercarnos a la victoria» resume el entrenador al acabar en el encuentro en Tenerife.
Y es que el conjunto cántabro está demostrando dos caras diferentes. En las dos primeras jornadas pasó igual. De ganar 4-0 al Eibar de una manera a perder 2-0 contra el Espanyol de una forma completamente diferente pero con el mismo once. Da la sensación de que a domicilio, el equipo no es igual de ambicioso que en El Sardinero ante su afición. El próximo sábado, en un encuentro ‘guapo’ que se suele decir, ante el Sporting, club donde se formó como entrenador, veremos que imagen plantea José Alberto.