Fernando Alonso, reciente nuevo embajador del circuito de Montmeló, en Barcelona, consiguió puntuar por fin. Y lo hizo en el GP de España, el de casa. Por primera vez en toda la temporada. El asturiano pasó décimo por debajo de la bandera a cuadros ondeada por Robert Lewandowski, pero una sanción de diez segundos a Max Verstappen, que era quinto, por un incidente con Russell permitió que Alonso acabara noveno en carrera.
Alonso se exprime a él y a su Aston Martin para acabar 9º
Alonso, que había sabido exprimir su Aston Martin, partía décimo con opciones de puntuar. Lo había hecho durante todo el fin de semana. Era la prolongación de las sensaciones que se tuvieron en Imola y en Mónaco. El coche ha sanado, ha crecido, y ha mejorado. Eso es indudable. Y en esta cita celebrada en Barcelona llegó la confirmación.
Pero faltaba un punto a descubrir, y la pista (hasta 50º en el asfalto se contabilizaron), volvió a desprender que, si bien el AMR25 es un coche mejor que el arrancó el año, en carrera se sufre. No tanto como antes, pero las fortalezas del sábado no son las mismas que las del domingo. Eso fue algo que no se había visto hasta el momento, sobre todo porque las temperaturas de Barcelona no han sido las mismas que en Imola ni tampoco con Montecarlo.
El AMR25 ha crecido, pero…
El asturiano tuvo importantes quebraderos de cabeza en la carrera, y no solo por el rápido desgaste de los neumáticos blandos, sino también porque, en ocasiones, este Aston Martin parece incontrolable. Ya lo había dicho el viernes, que con una tanda larga de vueltas, el coche se vuelve más impredecible.
Y eso fue lo que le costó a Alonso un error grave antes de la vuelta 20, cuando se salió de pista y tuvo una excursión en la grava. Esa excursión le hizo perder 15 segundos que al final fueron vitales para la lucha que tuvo al comienzo de carrera con Hulkenberg, el cual llegó en una sensacional 5ª plaza.
El motivo de esa excursión vino propiciado, sobre todo, por la pérdida de agarre en la parte delantera, con mucho subviraje que hacía, en varios instantes, que Fernando Alonso perdiera el control a la entrada de ciertas curvas lentas. Desde principios de año se viene comprobando que este coche ha nacido con problemas para la curva lenta, especialmente en cuanto a tracción a la salida de las curvas, mientras que en las curvas rápidas su rendimiento es mejor. Y es que, la falta de tracción y el rendimiento general a baja velocidad son sus puntos débiles, y eso, en Barcelona, se siguió observando.
Alonso: «Hay un cambio de tendencia»
Como tal, esas mejoras de Imola supusieron un paso al frente para aspirar a los puntos, y aunque sigue necesitando más evoluciones, especialmente en cuanto a ritmo de carrera, velocidad punta en recta y degradación de gomas, el piloto asturiano lo dio absolutamente todo para ir a por unos puntos que, tras salir 10º, parecían imposibles después de irse a la grava. Pese a ello, Alonso siguió creyendo. Prueba de esto fueron los espectaculares adelantamientos por fuera en la curva 3, la llamada ‘curvón’, a Colapinto, Bearman, Bortoleto y, al inicio de carrera, en la salida, el mismo intento a Hulkenberg, aunque con el alemán no se dio.
«Hay un cambio de tendencia. Está bien quedar noveno, pero si hubiéramos quedado P19 dormiríamos igual de bien», defiende un Alonso que en Mónaco ya colocó el objetivo en el GP de Australia de 2026.
Como contestó a los medios presentes en Barcelona, no quedaba otra, dice. Y eso es por la afición, que le sigue animando cuando las cosas siguen estando lejos. «¿Seguir creyendo? Al final, todo el mundo viene aquí a la carrera para ver cómo das el máximo. Y sería fácil tirar un poco la toalla o contentarte. La gente hace sacrificios para venir aquí. La gente trae a sus familias, a sus hijos y nosotros en la pista o el equipo, en las estrategias, en el pit stop, en todo, tenemos que dar el máximo», mencionó.
«Que todo el mundo sepa que lo hemos dado todo como siempre»
«A veces nos sale bien, otras veces mal. Hoy no creo que haya sido una carrera para recordar. Pero por lo menos que todo el mundo sepa que lo hemos dado todo como siempre», expresó. «Vi las gradas de pie, a la gente levantarse, vi las gradas agitadas en las últimas vueltas y eso nos dio ese plus«, agregó sobre una carrera que confirma que el coche ha dado el paso adelante que querían, pero que aún se requiere de algo más.
Sobre la motivación que mantiene en su carrera, a sus 43 años y a pesar de no poder competir por los objetivos que le gustarían, Alonso mantiene que «cada carrera que pasa en la que no puedes ganar quieres que llegue la siguiente para tener una pequeña revancha con los coches que sí compites«.
El español tuvo, de nuevo, que vaciarse por completo. «Sí, pero por desgracia nos hemos acostumbrado a darlo todo para hacer un 10º o un 11º. Yo creo que hace un año o dos años en Monza hice el 10º y para mí fue la mejor carrera del año. Después de hacer varios podios. Y este año recuerdo Suzuka, en la que sí que me vacié completamente e hice 11º, y fue totalmente anónima esa carrera. Pero hoy sí que hemos tenido que tomar algún riesgo para adelantar», cerró.