Prueba de fuego para Vinicius y Mbappé. El extremo brasileño y el delantero francés se enfrentan a la que será la segunda temporada juntos para ambos. Tras una campaña en la que no han conectado como se esperaba, tanto Vinicius como el propio Kylian deberá buscar la manera de encontrarse sobre el césped, elevar sus prestaciones y formar una dupla que haga disfrutar al madridismo, más allá de los egos de cada uno.
Mbappé ha salido claramente vencedor de la primera temporada de los dos ‘cracks’, al mando de la parcela ofensiva del Real Madrid. El de Bondy se ha consagrado como la estrella indiscutible de este Real Madrid de Xabi Alonso y el eje del proyecto. Acabó el pasado curso con 44 goles, siendo Bota de Oro y además, Pichichi de LaLiga con 31 goles. Mientras tanto, Vinicius se fue desinflando y tras su ‘no’ Balón de Oro, cayó en picado. Como si un diablo hubiera bajado a la Tierra y le hubiese robado el alma. No encaraba, no hacía goles, no se iba de sus rivales y no marcaba las diferencias. Aún así, los número no fueron malos, pero estuvieron lejos de su mejor nivel: 22 goles y 13 asistencias.
Esta temporada será crucial para Vini, porque está más que dado por hecho en Valdebebas, que la estrella y el líder del equipo fue Mbappé. Le costó arrancar, pero cada vez que estuvo, fue el que se llevó el equipo a cuestas para lograr los títulos que, para tristeza del madridismo, no llegaron. Tan ‘solo’ la Supercopa de Europa y la Intercontinental se fueron directas a las vitrinas del Bernabéu. Competiciones en las que, por cierto, marcó Mbappé.
El brasileño ha estado envuelto en un mar de dudas en cuanto a su futuro y su renovación en el club blanco. Primero, porque su entorno filtraba que los cantos de sirena de Arabia podía convencer al ‘7’ del Real Madrid, y segundo, porque la renovación que parecía firmada y pactada con su club, no lo estaba, y se fue demorando. Las dudas comenzaron a apoderarse de cierta parte de la parroquia merengue, a pesar de que parece que Vincius extenderá su contrato por mucho más tiempo en Chamartín.
Xabi Alonso y una misión clara: conectar a Vinicius y Mbappé
Xabi Alonso buscará sacar la menor versión de ambos sobre el terreno de juego. Tanto Mbappé como Vinicius está condenados a entenderse por el bien del equipo. Si eso sucede, lo más probable es que al Real Madrid le vaya bien en la temporada, porque son dos futbolistas diferenciales, de los mejores del mundo, que deben llevar las riendas de un equipo que aspira a todo. El nuevo ’10’ del Real Madrid es una máquina de hacer goles, y el ‘7’ debe comenzar a ser aquel ‘7’ que le dio dos Champions al equipo: en París y en Londres.
En el Mundial de Clubes vimos cómo Vinicius se movía por todo el flanco de ataque, incluyendo la banda derecha , posición en la que apenas ha jugado a lo largo de su carrera. Sin embargo, ‘Kyky’ comenzaba las jugadas desde la izquierda, pero terminando por dentro. Tuvo pocos minutos debido a su proceso de gastroenteritis que le impidió estar en los tres primeros partidos, pero cuando jugó contra el Dortmund, anotó un golazo de chilena, de ‘killer’ total.
Ambos se deben hacer mejores, retroalimentándose como lo hicieron los grandes jugadores, y dejar a un lado esas guerras personales que muchas veces, por no decir siempre, suelen salir mal. Y más aún con el Real Madrid, que es el equipo en el que el escudo siempre está por delante de cualquier jugador, mandatario o persona, en general. De no ser así, es muy probable que el año que viene haya una venta y el que más papeletas tiene es Vinicius. Por antigüedad y por ciclo cumplido.
Esta será la última bala de ambos juntos si los dos quieren triunfar junto y llevar la bandera del madridismo. Una prueba de fuego de niveles abismales, con el termómetro del Bernabéu encima de ellos en cada partido. Si se buscan y quieren, todo será más fácil. Por el contrario, el equipo se verá lastrado, y tanto Xabi -que no se casa con nadie- como el club, deberán asumir decisiones traumáticas.