El Real Madrid está a punto de debutar en Liga y echar a rondar en la nueva temporada 25/26. Los pupilos de Xabi Alonso tienen la misión de volver a encender a la afición, conectar con ellos y hacerles vibrar, tal y como dijo el tolosarra el día de su presentación que dijo que iba a hacer. En el extremo derecho hay un ‘casting’ de futbolistas que deberán trabajar si quieren luchar y hacerse con el puesto. Xabi ha demostrado hasta ahora ser un entrenador con personalidad, con carácter y que ‘no se casa con nadie’.
Rodrygo Goes, la espada principal en ese flanco ha sido uno de los jugadores más importantes de los último años en el Real Madrid, pero parece que no para Xabi. En el Mundial de Clubes, el entrenador español mostró la declaración de intenciones que tiene con el brasileño. Si no da resultados, al banquillo. Sea quien seas y sin importar el bagaje que lleves. Rodrygo no parece estar contento con la situación, pero ahora mismo su idea es quedarse en el Real Madrid. Si lucha por el puesto, tendrá minutos casi con total seguridad, porque calidad y talento le sobra, pero la regularidad es la que marca el camino. Frente al Tirol jugó alrededor de veinte minutos, y marcó el cuarto gol.
Brahim Díaz es el segundo jugador, por detrás del brasileño, que pide sitio en el equipo de Xabi Alonso. Es uno de esos jugadores diferentes, que tienen magia para encandilar al Bernabéu, pero no la regularidad necesaria como para disputar todos los encuentros como titular indiscutible, porque el verde no engaña y los números que generes son los que mandan. Ante el Tirol, jugó como titular y dio una asistencia, a Militao, para el 0-1, tras un centro exquisito. Es otro de los jugadores que Xabi va a vigilar de cerca porque en el club esperan que dé un paso al frente.
Mastantuono, el último en llegar
El último en llegar ha sido Franco Mastantuono, con el que ya alucinan en Valdebebas. El futbolista argentino ha llegado a la capital de España con ganas de demostrar su calidad, su talento y su personalidad al madridismo y, por supuesto, a su entrenador, con el que habló cuando estaba a punto de llegar al PSG, y que gracias a esa llamada cambió el rumbo y decidió fichar por el club blanco. Mastantuono, que avisó en su presentación de dejarse la piel por la camiseta, tendrá muchos minutos por lo que ha pagado el club por él, y porque es una apuesta para el futuro.
No caben todos, pero lo cierto es que Alonso cuenta con un abanico de opciones en ataque, a sabiendas de que hay dos jugadores intocables arriba, que son Mbappé y Vinicius. O al menos, lo eran con Ancelotti, porque el vasco ha demostrado que es un técnico al que no le tiembla el pulso y que buscará siempre el bien del grupo por encima de cualquier individualidad.