Aston Martin ya ha dado el primer paso para triunfar en 2026. El equipo de Silverstone tiene marcado en rojo en el calendario la temporada que viene, primer curso con nueva reglamentación, donde esperan dar un paso adelante en la parrilla de Fórmula 1 para brindar alegrías a Fernando Alonso. Los motores jugarán un rol esencial en la normativa técnica que se introduce el próximo curso, donde se eliminará el complejo MGU-H y el MGU-K será más potente. Contar con una unidad de potencia poderosa y eficiente lo será todo para triunfar y, en 2026, Aston Martin iniciará su camino junto a Honda.
El equipo de Alonso se puso hace tiempo manos a la obra para lograr un motor competitivo. De hecho, lleva muchos meses (no hay día exacto pero meses antes de abril) trabajando en su nuevo motor Honda. Según ha podido saber este medio, poco antes del parón veraniego, esa nueva unidad de potencia fue puesta a prueba. En Japón, concretamente, hace algunas semanas. Aston Martin ya sabe cómo sonará su nuevo motor aunque solo algún afortunado de la fábrica ha podido escuchar su rugido.
Desde Silverstone aportan tranquilidad porque sus tiempos de desarrollo son correctos y van a un paso similar al de la mayoría de escuderías de la parrilla. Tal vez Red Bull, que se estrena como motorista, deje alguna duda. No hay retrasos como se ha especulado en alguna ocasión y el paso es firme. Saben que Mercedes, Ferrari, Audi y Red Bull Powertrains también están poniendo la carne en el asador. Tanto Alonso como Andy Cowell siempre han respaldado públicamente el trabajo y empeño de la firma japonesa.
“Los trabajos han estado en marcha durante muchos, muchos meses, así que el diseño de la unidad de potencia de Honda encaja como un guante con la parte trasera de nuestro monocasco y la parte delantera de nuestra transmisión”, expresó el CEO hace un mes. La fe desde Silverstone en el progreso de la mano de su nuevo socio Honda, que motoriza a Red Bull hasta final de temporada, es ciega. «Si no progresamos el año que viene, no será por Honda», desvela con rotundidad una fuente desde la fábrica. Se intuye, por tanto, que la marca nipona está cumpliendo con su parte.
Unas instalaciones al nivel de las de Aston
Las pruebas del nuevo motor que llevará Alonso el año que viene fueron realizadas en la imponente fábrica de Honda en Sakura, en Japón. Sus espectaculares instalaciones se extienden por una superficie de 27.400 metros cuadrados, donde la firma nipona ha invertido 250 millones de euros. Casi nada. Andy Cowell, de hecho, quedó impresionado con la sede cuando la visitó antes del Gran Premio de Suzuka: “Veo a Honda comprometida, el nivel de esfuerzo que han puesto en marcha en Sakura es inmenso. La fábrica es impresionante, son creativos y hay motivación en un gran grupo de trabajo”.

El jefe de equipo ha hecho alguna otra referencia en el pasado alabando la fábrica de Sakura, refiriéndose a los plazos de desarrollo de la nueva unidad de potencia: “El hardware ha sido probado en Sakura y nuestra transmisión ha sido probada aquí, en Silverstone, así como también acoplada a la unidad de potencia en Sakura. Hay reuniones diarias y luego hay reuniones más regulares a un nivel más alto para asegurarnos de que todos estamos trabajando en la dirección correcta”. Por ahora, están en la dirección correcta con el objetivo puesto en los test de Barcelona del 26 al 30 de enero.
Honda motoriza a Red Bull hasta que se baje el telón del curso en diciembre en Yas Marina y ha dominado este deporte durante las temporadas 2021 (aunque no ganó el Mundial de Constructores), 2022, 2023 y 2024. Ha sido la referencia en la parrilla de Fórmula 1. El año que viene irá de la mano de Aston Martin y Fernando Alonso y esperan lograr éxitos juntos en el futuro.