El Real Madrid ganó a Osasuna (1-0) en el primer encuentro de Liga en el Bernabéu. El público asistió al primer duelo de los suyos en la campaña 25/26, y a pesar de que fue una victoria muy trabajada, el equipo de Xabi Alonso fue mejor, dominó el partido, y encontró la senda del triunfo en las botas de Kylian Mbappé. El delantero francés volvió a marcar las diferencias ya no solo con su gol, sino en cada jugada del ataque blanco sobre la portería de Sergio Herrera.
En le primera mitad, el Real Madrid buscó con ahínco el gol que le pusiera por delante en el marcador. La buena defensa de Osasuna impidió que el equipo de Xabi desplegara su fútbol ofensivo, vertical y de asedio, ese que tanto quiere el técnico tolosarra. Aún así, el Madrid no perdió la paciencia, y lo intentó una y otra vez. Sobre todo a raíz de dos jugadores que estuvieron de notable alto: Álvaro Carreras y Dean Huijsen. El costado izquierdo tuvo mucho talento enlazado, pero insuficiente para derribar el muro rojillo.
No fue hasta en la segunda parte cuando el de Bondy desequilibrase la balanza a favor del Real Madrid. Propició el penalti que le hizo Juan Cruz, derribándole en el área, y se encargó de lanzarlo y de transformarlo, para poner 1-0 al conjunto blanco arriba, y anotar así, en su cuenta particular, el primer gol de la temporada.
La campaña pasada anotó un total de 44 goles, fue Pichichi de LaLiga con 31 dianas y habiendo estado a un bajo nivel en sus primeros meses como jugador madridista. Poco a poco se fue adaptando, entonándose y conociendo a sus compañeros, y aunque las lesiones no le dieron tregua, se echó el equipo a la espalda en muchas ocasiones, anotando un hat-trick al Manchester City, otro al Barcelona, marcó el gol del empate de la final de Copa del Rey… sin ser su mejor año, hizo muy buenos números, por lo que se presupone que si el equipo está medianamente bien, Mbappé puede batir su propio récord.
Además, superó a Cristiano Ronaldo como goleador en su primer año como madridista, haciendo unos números que están al alcance de muy pocos delanteros. Eso sí, lo logró jugando más partidos que los que jugó en 2009 el astro portugués, pero la realidad es que este año está más fino físicamente y ya ha pasado por ese proceso de adaptación. El Bernabéu, con todo y con eso, espera la mejor versión del francés, que cada vez se parece más al de 2022.