Arda Güler no vivió el estreno de Champions soñado: el futbolista turco estuvo lejos del nivel esperado, e incluso llegó a impacientar a un público que por momentos mostró su descontento. Fue responsable directo del gol del Marsella. Le llegó la primera prueba importante y no estuvo a la altura, y debe tomar nota, porque la competencia empieza a ser muy elevada.
Toque del Bernabéu a Güler
Arda Güler no estuvo nada bien en la sufrida victoria del Real Madrid ante el Marsella. Fue responsable en el gol encajado, dejando vendido a la zaga con un pase atrás interceptado por los rivales. No ayudó que su primera reacción fuera quedarse parado, reaccionó, tarde, pero ya no había nada que hacer. Pero más allá de ese fallo, que puede ser puntual, estuvo fallón durante todo el partido, con pocas ideas, y le faltó intensidad a la hora de trabajar defensivamente.
No fue su noche, porque no se escondió, no paró de pedirla, de ofrecerse, y en muchos momentos si aportó soluciones, pero en momentos muy puntuales. Porque en el computo global estuvo mal. Y así se lo recriminó un Bernabéu al que se le iba agotando la paciencia a medida que pasaban los minutos y se mantenía el empate, con una pitada, muy leve, pero pitada.
Güler y su gran temporada
Arda Güler ha comenzado la temporada cuajando unos grandes partidos, adaptándose a su nuevo rol, más pendiente de la creación, aunque sin renunciar a las posiciones de ataque. Su progresión está siendo positiva y parece ser uno de los fijos de Xabi Alonso en esta nueva temporada. Sin embargo, el runrún, no ha desaparecido. Porque son muchos los sectores que señalan que Güler no puede jugar en una posición de tal especialidad, que en partidos de Liga con rivales más flojos puede cubrir el expediente, pero que, en partidos importantes, le puede pesar la responsabilidad.
Y eso fue lo que pasó anoche. Más que el rival le pesó el escenario, le pesó la Champions League, le pesó el escaparte europeo y pudo costarle caro. El Santiago Bernabéu es uno en Liga y es otro en Champions. Es otra atmósfera, otro ambiente y la responsabilidad es mayor. Su misión es ser el cerebro en una competición en la que se permite fallar, pero poco, y ayer no era el día para ello. Con rivales tan complicados en esta primera fase, los tres puntos eran capitales para los blancos, y cerca estuvieron de no lograrlo, y mucho tuvo que ver el turco.
Confianza plena de Xabi Alonso
Arda Güler es una de las apuestas de Xabi Alonso para esta temporada y parece uno de los intocables, y de momento, lo seguirá siendo. Pero debe andarse con ojo, porque Bellingham está a punto de volver al equipo y hay muchos futbolistas que piden sitio en el once. El técnico vasco sigue buscando el mejor equilibrio para poder sacar el máximo de sus jugadores, de momento, y veremos cómo encaja el truco con el inglés en los planes del entrenador.
Güler ha suspendido en la primera prueba importante del año. Las cosas no le salieron y fue el responsable del único tanto que encajó el Real Madrid, que puedo costarle el partido. El primer borrón en una temporada en que todo le está saliendo bien y en la que parecía que se estaba adaptando a su nueva posición, pero en la Champions League, las cosas pesan más. Debe andarse con ojo, Xabi Alonso ya ha demostrado que puede tener favoritos, pero no se casa con nadie,